Suspiraba el Tenerife por lo que va a vivir esta tarde: una última jornada tranquila, con la salvación en el bolsillo y la mirada puesta en las vacaciones y el próximo proyecto. El empate del pasado martes en Lugo ha posibilitado que el deseo se convirtiera en realidad y que el duelo de hoy con el Real Zaragoza, también salvado, no sirva más que para despedir a los numerosos jugadores que disputarán su último partido con la camiseta blanquiazul.

Los que cumplen contrato y no serán renovados (Raúl Cámara, Héctor Hernández, Montañés, Coniglio y Nano), los que pintan su futuro de otro color (Jorge Sáenz) y hasta alguno llamado a rescindir de forma amistosa (Tyronne) vivirán un día especial en el Heliodoro, que despedirá a cada uno en función del cariño que se ha ganado y del servicio que ha prestado a la causa.

En un día de protestas en la grada por la mala temporada o de deserción en beneficio de alargar la tarde en la playa u otros planes de domingo, habrá oportunidades sobre el césped para los que se marchan y para aquellos que han esperado pacientemente su turno en el banquillo. Es de suponer que, Luis César Sampedro mediante, será el caso de Ángel Galván, suplente de Dani Hernández durante las 41 jornadas anteriores, que hoy se estrenará con el primer equipo en el Campeonato de Liga.

El Zaragoza, otra de las decepciones del presente Campeonato, llega a la Isla con una considerable lista de ausencias: Grippo, Toquero, Álex Muñoz, Zapater, Papunashvili, James Igbekeme y Guitián. Víctor Fernández, tercer entrenador de la temporada y ya felizmente renovado, también alineará (ya lo hizo la pasada semana) a su portero suplente y formará un once competitivo para despedir la temporada con una sonrisa. La tripleta Pombo/Soro/Pep Biel escoltará a Marc Gual, que será el delantero titular.