Primer relevo: 800 jubilaciones en tres años en la Administración autonómica

A corto plazo, en tres años, unos 800 empleados públicos de la Administración General de la Comunidad Autónoma se jubilarán, el 10% del total de la plantilla fija de este ámbito de la Administración regional. Se trata del primer gran relevo generacional que afronta el sector público autonómico, que afronta un cambio sustancial de sus recursos humanos en un periodo de entre 10 y 15 años. Son funcionarios de carrera y personal laboral fijo que van a cumplir entre este año y 2026 la edad de jubilación legal, que es de 66 años y seis meses.

La Comunidad Autónoma tiene cuatro ámbitos diferenciados en cuanto a la organización de su personal: Administración General, Sanidad, Educación y Justicia. El boom de las jubilaciones en el sector público afecta a todas las administraciones públicas por igual y los cálculos estiman que en 10 años alrededor de un 40% de los empleados de la Comunidad Autónoma se jubilarán, que son aquellos que entraron en los años 80 y principios de los 90 en la Administración y que tienen actualmente entre 50 y 55 años.

La Administración General configura los centros directivos de las Consejerías y asuntos esenciales como la gestión tributaria, medio ambiente, servicios sociales, obras públicas, vivienda o la gestión de los servicios de empleo. La plantilla supera los 11.000 empleados, aunque la Dirección General de Función Pública contabiliza en los cálculos de la jubilación al personal fijo con plaza de funcionario o laboral, que suman un total de 7.790 trabajadores, el resto es personal interino o temporal que está sujeto a los procesos de estabilización que se están desarrollando, unos 3.500.

Aumento con los años

Los cálculos realizados por Función Pública son que este año causarán baja por jubilación 189 empleados, en 2025 serán 259 y en 2026 un total de 351. Se trata de cifras que irán aumentando con el paso de los años ya que la media de edad se encuentra sobre los 53 años, por lo que la vida laboral finalizará en una década aproximadamente.

Los problemas derivados de la crisis financiera que se inició en 2008 y las fuertes políticas de austeridad aplicadas en esos años paralizaron las ofertas de empleo público, lo que supuso la entrada de miles de interinos pero, a la vez, la edad media de los funcionarios y empleados con plaza ha ido aumentando, sin que haya un relevo acorde con el elevado número de trabajadores que están en la fase final de su vida laboral. Con las oposiciones convocadas en los últimos años se han ido rejuveneciendo las plantillas pero sigue siendo insuficiente.

La preocupación cunde porque al ritmo actual de ofertas de empleo público, tramitación, desarrollo y culminación no se llega a tiempo para cubrir al menos las plazas que van quedando vacantes por jubilación, lo que se denomina tasa de reposición. El ministro de Función Pública, José Luis Escrivá, anunció recientemente que en 2025 desaparecerá la tasa de reposición, por lo que cada Gobierno autonómico, cabildo o ayuntamiento podrá convocar todas las plazas que necesite en las ofertas de empleo y no estar limitados a lo que marque el Estado. Para Canarias la eliminación de este condicionante puede llegar tarde si se mantiene el ritmo de relevo de nuevos empleados públicos para sustituir a los que se van.

Procesos selectivos

Función Pública presume de que hay actualmente en marcha 232 procesos selectivos, pero de ellos solo 45 son para nuevas plazas ya que el resto –187– son los procedimientos abiertos para estabilizar al personal interino de corta y larga duración que ya trabaja para la Administración autonómica, tanto funcionarios como laborales. De las 4.088 plazas que suponen estos procesos 3.499 son de estabilización, por lo que de nueva entrada de personal son 589, cifra que no cubre el déficit que genera las jubilaciones previstas.

La Dirección General de Función Pública anuncia un refuerzo de personal en el departamento –ya el anterior Gobierno lo anunció en varias ocasiones– para imprimir más agilidad a la tramitación de los procesos selectivos ya que aún queda por abordar en este año y en los próximos 2025 y 2026 un total de 112 procesos, que comprenden 2.051 plazas más. Los sindicatos se muestran escépticos con que se llegue a tiempo a cubrir al menos las plazas vacantes por jubilación y otras contingencias en los tres próximos años por la demora en las distintas fases de las oposiciones, sobre todo en la adjudicación de las plazas y la toma de posesión de las mismas. «Si no hay más celeridad la falta de personal será aún mayor en el corto y medio plazo», advierten los representantes laborales.

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