La Agencia Tributaria acelera las oposiciones para cubrir 119 vacantes en Canarias

La Agencia Tributaria Canaria (ATC) se desliga del resto de la Administración General de la Comunidad Autónoma y convocará su propia oferta pública de empleo (OPE) antes de fin de año. El órgano recaudatorio autonómico arrastra un déficit de personal desde sus inicios y, lejos de solucionarse, se ha agravado. Según los informes oficiales, alrededor de un 40% de los puestos de la plantilla total de la Agencia está vacante y solo parte de ellos se cubren con personal interino a la espera de que fructifiquen las distintas oposiciones que se han convocado en los últimos años. La actual relación de puestos de trabajo (RPT) se compone de 287 plazas, de las que 119 figuran como vacantes a fecha de 30 de septiembre. 

La ATC cumple diez años en 2024 desde su creación por la Ley 7/2014, de 30 de julio, como organismo autónomo y brazo ejecutor de la política fiscal y recaudatoria de la Comunidad Autónoma. En esos momentos se estaba saliendo aún de la crisis financiera de 2008 y el Gobierno canario salía también del ostracismo tras varios años consecutivos sin convocar ofertas de empleo público. Un informe de la propia ATC determina que con la oferta de empleo público «se persigue paliar la escasez de medios humanos, deficiencia que ha arrastrado desde su creación».

El plan de acción anual del organismo tributario establece como primer objetivo estratégico la mejora de la gestión de los recursos humanos y materiales de la Agencia, dada su especial trascendencia para toda su actividad. Por ello se pone especial énfasis en el área de recursos humanos «por cuanto que son el presupuesto necesario para el acometimiento de cualquier otra tarea y que existe en la Agencia un gravísimo déficit de personal».

La OPE de este año está compuesta por 21 efectivos de turno libre y siete de promoción interna

Actualmente acaba de convocarse las pruebas de la OPE de 2020, que incluye 66 plazas de la escala tributaria distribuidas en 49 de turno libre y 17 de promoción interna y está por desarrollarse aún los procesos selectivos que son competencia de la ATC derivados de la OPE de 2021 con otras 45 plazas de escala tributaria, 33 de ellas en el turno libre. La dirección de la Agencia quiere acelerar los procesos de estas dos convocatorias para cubrir buena parte de las vacantes que tiene la plantilla, con el fin de poder cumplir los principales objetivos del organismos, que son la recaudación tributaria y el control del fraude fiscal, prioridad de la Administración autonómica, lo que le permite también elevar la tasa de reposición hasta el 120% de las necesidades a cubrir con las vacantes que se van generando anualmente. En su informe la Agencia advierte que la promoción interna tampoco es una solución a las carencias de personal ya que no generan un aumento de efectivos y, por lo tanto, no contribuyen a la consecución del objetivo estratégico de aumento de la plantilla. 

OPE 2023

Tras la última reunión celebrada esta semana entre la Dirección General de Función Pública y los sindicatos, la ATC ha determinado la convocatoria de una OPE independiente del resto de la Administración General para un total de 21 efectivos por el turno libre y siete de promoción interna. Sin embargo, varias de las plazas que figuran en la propuesta no están aún dotadas presupuestariamente porque está por aprobarse una nueva relación de puestos de trabajo (RPT) en la que se crean nuevos puestos, sobre todo en la escala superior de Administradores Tributarios del grupo A1.

Con las ofertas en marcha de 2020 y 2021 más las plazas que se añaden ahora se podrá alcanzar una plantilla que cubra las necesidades que tiene en su plan de acción la Agencia Tributaria Canaria (ATC). Con la dinámica actual de funcionamiento de las oposiciones autonómicas, las convocatorias tardarían al menos dos años más en ejecutarse.

En la reunión con las centrales sindicales, se pusieron sobre la mesa distintos informes para justificar la necesidad de convocar la OPE de 2023 de forma independiente y, de esta forma, imprimir mayor celeridad a los procesos selectivos, con el fin de dotar los medios humanos indispensables para intensificar la lucha contra el fraude fiscal.

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