Loro Parque recibe el año con el nacimiento de 12 crías de pingüinos

El zoológico portuense celebra la llegada al mundo de cuatro pingüinos saltarrocas y ocho pingüinos papúas

Cría de pingüino saltarrocas en Loro Parque

Cría de pingüino saltarrocas en Loro Parque / El Día

El Día

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Loro Parque da la bienvenida al año 2023 con el nacimiento de 12 crías de pingüinos en sus instalaciones de Planet Penguin, en Puerto de la Cruz. Se trata de cuatro pingüinos saltarrocas (Eudyptes chrysocome) y ocho pingüinos papúas (Pygoscelis papua). Una “exitosa temporada de cría” a la que se añaden las buenas predicciones para el nuevo año, que apuntan a "más nacimientos de otras especies" en las próximas semanas y meses.

Las crías papúas se encuentran junto a sus padres en la propia exhibición, a la vista de los visitantes, mientras que los ejemplares de pingüinos saltarrocas son monitorizados por los profesionales de Loro Parque en la Baby Penguin, tanto por la delicadeza de la especie como por el gran reto que ha supuesto su reproducción en las instalaciones de Loro Parque.

“En los saltarrocas, criados sin sus padres, el período de adaptación es de manera paulatina igual que el de introducción del resto de aves”, explican desde el zoo, que en 2022 cumplió 50 años de existencia. Durante esta primera etapa de incubación, los pichones saltarrocas serán cuidados en una estación de cría cuya temperatura se adaptará gradualmente para empezar el proceso de integración y socialización con el resto del grupo.

Pinguino papúa junto a su cría en Loro Parque

Pinguino papúa junto a su cría en Loro Parque / El Día

Para que estos animales se introduzcan progresivamente con éxito, Loro Parque reproduce las mismas condiciones ambientales y climáticas que tienen en su medio natural, recreando sus hábitats con 12 toneladas de nieve que caen a diario en el recinto, respetando los ciclos de luz normales de la Antártida y recreando la primavera polar, caracterizada por la gran cantidad de luz y los días más largos.

Los pingüinos papúas, naturales de las islas subantárticas y de la Antártida, son considerados por la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) como una preocupación menor. Por su parte, los saltarrocas, propios de la Antártida, se consideran una especie en estado vulnerable. Su población ha disminuido drásticamente desde 1950. Loro Parque trabaja junto a otros santuarios de animales para garantizar su conservación a través del cuidado humano.

El nacimiento de estos cuatro saltarrocas y los ocho papúas supone un resultado magnífico para los programas de reproducción de Loro Parque, que ya ha logrado crías de todas las especies de pingüino. Asimismo, es un éxito para la conservación de la especie, amenazada por las alteraciones del cambio climático en la circulación marina y los glaciares.

Un pingüino papúa junto a su cría en Planet Penguin, en Loro Parque

Un pingüino papúa junto a su cría en Planet Penguin, en Loro Parque / El Día

Loro Parque, que se define como una embajada animal con 50 años de historia, cuenta con la reserva de papagayos más grande y diversa del mundo, así como con especies y ecosistemas de los cinco continentes. La institución, junto a Loro Parque Fundación, mantiene un firme compromiso con la conservación de la biodiversidad en las Islas Canarias y refuerza el papel de los centros zoológicos modernos acreditados como protectores de la fauna amenazada.

Este parque cuenta con la Placa y la Medalla de Oro al Mérito Turístico otorgada por el Gobierno de España y la Medalla de Oro del Gobierno de Canarias, entre otros galardones. Además, ha sido reconocido con el Premio Príncipe Felipe a la Excelencia Empresarial y es el único zoológico de Europa que cuenta con la Certificación de Bienestar Animal Human Certified, de la entidad American Humane.