Miguel Villarroya cree que parar Cuna del Alma afecta al progreso de la Isla

La paralización cautelar de las obras del proyecto turístico Cuna del Alma en El Puertito de Adeje es una medida cuestionada desde el sector empresarial. El director general de Spring Hoteles, Miguel Villarroya, advierte de que la medida adoptada por el Gobierno de Canarias no favorece el desarrollo en la Isla. «Puede perjudicar gravemente la credibilidad de las diferentes administraciones y, de paso, al progreso y bienestar de la sociedad canaria», apuntó.

Miguel Villarroya considera que «es necesario encontrar un equilibrio entre la sostenibilidad y la inversión, manteniendo el ecosistema sin canibalizar el territorio con un crecimiento desmedido para lograr un modelo óptimo que permita la convivencia y la prosperidad de nuestra economía y sociedad».

Esa es la premisa de la que parte el director general de Spring Hoteles, quien, a renglón seguido, plantea condicionantes: «Pero las posibilidades tienen que quedar claras desde el principio. Si se puede se puede y si no se puede, pues no se puede, pero es necesario que exista una postura clara para todos los implicados».

"Es necesario encontrar un equilibrio entre la sostenibilidad y la inversión"

Miguel Villarroya

— Director general Spring Hoteles

En su reflexión acerca de la situación en la que se encuentra el proyecto Cuna del Alma, Villarroya recuerda que «el Plan Parcial El Puertito de Adeje está aprobado por la Comisión de Urbanismo y Medioambiente de Canarias (Cumac) desde 1998 y, en diciembre de 2021, se aprueba el proyecto de urbanización. Con el plan aprobado y licencia para el proyecto, entendemos que la promotora ha cumplido la ley». El problema se suscita después. A su juicio, «si ahora se para la obra, lo que estamos dando a entender a los inversores es que no existen garantías jurídicas en Canarias, y, honestamente, creo que eso es algo que no interesa a nadie y que puede perjudicar gravemente la credibilidad de las diferentes administraciones y de paso al progreso y bienestar de la sociedad canaria».

En esta línea se han pronunciado dirigentes de las diversas patronales. Tanto Pedro Alfonso, presidente provincial de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), como su homólogo de la Federación Provincial de Entidades de la Construcción (Fepeco), Óscar Izquierdo, coincidieron en destacar que la paralización de las obras tendrá consecuencias graves para la economía y el empleo en Tenerife. Valoraron que ello ahuyenta a los inversores de Tenerife y de Canarias, ya que se constata la inseguridad jurídica que implantan las administraciones en el Archipiélago. Ambos atribuyen «un interés ideológico y partidista» a la paralización de la obra, «una situación indefendible».

Línea en la que también se pronunció Santiago Sesé, presidente de la Cámara de Comercio de la provincia tinerfeña, quien sostuvo que «la falta de seguridad que generan casos como el de Cuna del Alma frena el desarrollo de la Isla y espanta las inversiones».

El 11 de noviembre la Consejería Transición Ecológica y Lucha Contra el Cambio Climático comunicó la paralización de forma cautelar de todos los trabajos al detectarse ejemplares de una planta protegida, la viborina triste. Y el pasado 23, la Agencia Canaria de Protección del Medio Natural, también del Gobierno canario, incoaba un expediente sancionador a la promotora por carecer el proyecto de la evaluación de impacto ambiental preceptiva.

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