Día grande en Puerto de la Cruz, para la esencia, las raíces y la identidad de un pueblo que cuida de sus tradiciones del día de San Juan, donde las grandes protagonistas fueron los 400 ejemplares que participaron en el Baño de las Cabras en el Mar, un acto tradicional que recupera la ciudad y que forma parte de la llega del verano.

Ayer, cientos de portuenses y de visitantes esperaban antes de las ocho de la mañana a la llegada de los rebaños que bajaban de la parte alta del Valle de La Orotava para cumplir con la cita anual desde 1986 (salvo en 2020). Fue el momento de la recuperación de un acto ancestral por parte de un colectivo liderado por el profesor Manuel Lorenzo Perera. Un ritual que recuerda la importancia no solo del sector primario, sino también de mantener y cuidar las tradiciones que desde ese año reivindica su lugar en el marco de los actos «que hacen de este San Juan unos días tan especiales, junto al Enrame de los Chorros y a la programación dedicada a celebrar la noche en la playa, con las tradicionales hogueras y con unos conciertos».

Como cada año, el nombre de Chucho Dorta se escuchó entre cabreros y vecinos. Jesús Eustaquio Dorta falleció hace 20 años. Simbolizó el Baño de las Cabras en el Mar, que protagonizó durante años ataviado como los aborígenes.

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Baño de las Cabras en el muelle del Puerto de la Cruz Carsten W. Lauritsen

Marco González, alcalde portuense, agradeció la participación de todos los colectivos, como los cabreros, la Asociación Auchón Guanil –que hizo una exhibición del juego del palo–, y a José Manuel Espinel, «quien lidera la recuperación de los juegos canarios de inteligencia» que completaron, junto a los miembros del aula de Educación de la Universidad de La Laguna, «una mañana repleta de la celebración de un sentimiento que ahonda en nuestras raíces por siglos», señala el gobierno municipal de Puerto de la Cruz.

«Es aquí donde la figura de Manuel J. Lorenzo Perera se agiganta», resaltó el alcalde en el momento de homenajear al premio Canarias de Cultura Popular de 2022. «Un homenaje tan merecido que con cariño dedicamos desde nuestra ciudad hacia su ingente labor», explicó. González subrayó «ese mensaje de cuidado e impulso de nuestras tradiciones que tanto tienen que ver con nuestro origen y con esa oportunidad de distinguir a la ciudad como un lugar que celebra y comparte esa identidad que estos días es tan palpable».