Emilio Navarro, alcalde de Santiago del Teide, volvió a pedir ayer una solución urgente para que se ponga fin a la calima de áridos provocada por las obras del Anillo Insular que afecta al casco histórico del municipio. Navarro ha presentado un requerimiento a Salud Pública y Transición Ecológica, departamentos del Gobierno de Canarias, para «el cumplimiento urgente» de las medidas destinadas a minimizar las nubes de polvo en suspensión producidas por los trabajos del Anillo Insular y que «derivan en un daño a la salud pública de la población del casco de Santiago del Teide». «Las medidas que ya habían sido acordadas en el pleno del pasado 27 de mayo pero aún no hemos tenido respuesta ni se ha procedido a la erradicación de la gran cantidad de polvo en suspensión que generan dichas obras», denunció el alcalde.

Los vecinos del centro histórico de Santiago del Teide llevan meses sufriendo los efectos de una asfixiante calima. No está provocada por el polvo en suspensión sahariano, como ocurre en este fenómeno climático, sino por el procesamiento de los áridos de las obras del Anillo Insular, próximo al casco del municipio sureño. Los trabajos corresponden al tramo del Anillo Insular entre El Tanque y Santiago del Teide, e incluyen la construcción del túnel de Erjos, bajo el macizo de Teno. En la petición de Emilio Navarro a Salud Pública, el alcalde solicita, con carácter de urgencia, que «se proceda a la inspección de la zona y al estudio del impacto para la salud que la existencia de esta nube de tierra puede tener sobre la salud de los habitantes del casco histórico de nuestro municipio. Mientras, el requerimiento remitido a la Consejería de Transición Ecológica del Gobierno de Canarias solicita que «se proceda al análisis, comprobación y seguimiento» de los estudios medioambientales emitidos en relación al expediente de las obras del Anillo Insular de Tenerife, «debido al modo en el que se están ejecutando dichas obras y los perjuicios que se están ocasionando en la zona».

Ante ello, el regidor santiaguero asegura que «a través de dicho requerimiento esperamos que finalmente se implanten la medidas acordadas por todas las partes y se dé respuesta a un problema en el que, desafortunadamente, se ha visto implicada la salud pública de los vecinos, dada su continuidad en el tiempo sin ver que se hayan puesto en marcha actuaciones alternativas para el procesamiento de áridos que no atenten contra la seguridad de la población».

Emilio Navarro ya ha pedido en otras ocasiones en las últimas semanas una solución urgente a este problema. La última vez fue el 21 de julio, cuando el político del PP pidió a los responsables del Gobierno de Canarias y de la empresa que ejecuta los trabajos del Anillo que «aceleren la ejecución de las medidas que entre todas las partes se han aprobado para acabar con esta nube de polvo».