El Gobierno de Canarias se encuentra a la espera de que la Dirección General de Costas, por fin y en un razonable tiempo, otorgue la adscripción del dominio marítimo-terrestre de Fonsalía, en Guía de Isora, un documento técnico vital para poder comenzar las obras del puerto de Fonsalía como infraestructura referente para las comunicaciones en el Oeste y Sur de la Isla. En este caso, fuentes del Ejecutivo regional confirmaron que hay optimismo por sacar adelante el proyecto del puerto de Fonsalía, que se encuentra “vigente y muy vivo en la vía administrativa” y que no está caducado o ha sido rechazado por el Estado.

Sobre ello, las mismas fuentes consultadas apuntaron que hasta en dos ocasiones el Gobierno de Canarias, a través de Puertos Canarios, ha presentado argumentación técnica conveniente a los requerimientos solicitados por parte del área competente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. Se trata de un requisito indispensable para conseguir la adscripción, que, en definitiva, es la autorización para la construcción, gestión, usos y desarrollo del Puerto de Fonsalía.

Un largo recorrido

El proyecto se gestó en 2001 tras incluirse en el Plan Canario de Puertos desarrollado por el Ejecutivo regional y, desde ese preciso momento, el propósito de la infraestructura dio pasos para adaptar el Plan Insular de Ordenación del Territorio (PIOT) y normas urbanísticas al proyecto. En 2006, “se declaró el carácter de Interés Estratégico” para la Isla y en 2014 obtuvo la Declaración de Impacto Ambiental favorable a la infraestructura portuaria, uno de los grandes pasos y requisitos que se necesitan para que se puedan ejecutar los trabajos .

Ya en diciembre de 2015, el Ejecutivo regional solicita a la Dirección General de Costas la adscripción del dominio público marítimo-terrestre, que es el último paso para la construcción del Puerto de Fonsalía en Guía de Isora, en el lugar estratégico existente entre el Acantilado de Los Gigantes (Santiago del Teide) y Playa de Las Américas (Adeje).

No obstante, hasta 2018 el Estado no da señales de vida y lo hace con un documento en el que detalla hasta 11 asuntos a corregir. A finales de este mismo ejercicio, el Ejecutivo regional argumenta, corrige o aporta a la solicitud de Costas, que replicó con nuevos inconvenientes al proyecto canario. Nuevamente, se contesta al detalle a los requerimientos en noviembre de 2019.

En cualquier caso, la Dirección General de Costas entendía que no se habían analizado convenientemente las alternativas a un proyecto como el Puerto de Fonsalía, siendo la contestación canaria que “el plan estaba muy bien justificado” a través de un Plan Territorial específico. El resto de cuestiones, entre las que destacaba la falta de un helipuerto, “son del todo resolubles”, añaden las mismas fuentes autorizadas.

El plan no está rechazado

Estos problemas han significado que en determinados sectores sociales y de la administración se dé por hecho que el Estado ha rechazado Fonsalía y “es algo que es rotundamente falso. No está ni mucho menos rechazado, ni la vía de solicitud caducada, porque empieza a contar cuando se firma el acta de replanteo, que sería el inicio de las obras previstas”.

“Queda claro, entonces, que el proyecto del Puerto de Fonsalía es un plan que está administrativamente vivo y muy vivo. El único paso que quedaría es que Costas dé el dominio marítimo-terrestre o vuelva a remitir otro escrito sugiriendo cambios o pidiendo información. El resto es todo falso”, dijeron tajantemente.

Por tanto, el Gobierno de Canarias se encuentra en estos momentos a la espera de que el Estado otorgue el dominio marítimo-terrestre para comenzar las obras del puerto de Guía de Isora, aunque se tendrá que volver a hacer un modificado para actualizar y calcular el coste de una infraestructura que en 2015 alcanzaba los 205 millones de euros.

El valor de esta infraestructura tinerfeña se centra en sus funciones estratégicas, ya que está planificada para que puedan operar barcos de pasajeros interinsulares, embarcaciones deportivas y pesqueras. El puerto está planificado con una explanada de 64.000 metros cuadrados de superficie y podrá acoger cinco atraques comerciales que cubrirán rutas con La Palma, La Gomera y El Hierro. Además, podrá dar cobijo hasta a 470 embarcaciones deportivas gracias a una línea de atraque de 739 metros.

Con la infraestructura de Fonsalía, Puertos Canarios completará la red de puertos principales de Tenerife y “supondrá una mejora de la actividad logística portuaria y de la conectividad con las Islas Occidentales”, recordaron los consultados.