José Julián Mena se convertirá hoy en alcalde no adscrito de Arona tras ser expulsado del Partido Socialista el pasado día 17 por negarse a acatar la orden de entregar su acta de concejal. El secretario del Ayuntamiento aronero, Pedro Hernández Velázquez, comunicará esta nueva situación a Mena durante el pleno que se celebrará esta tarde-noche, desde las 19:00 horas, en el Centro Cívico de Cabo Blanco. También será declarado concejal no adscrito Luis García, quien fue destituido en junio por Mena al frente de la Concejalía de Urbanismo, desatando una crisis en el grupo de gobierno socialista pese a que contaba con mayoría absoluta. García también fue expulsado de la formación por no entregar el acta de concejal.

La comunicación de que Mena pasa a ser alcalde no adscrito, es decir, sin representar a ningún partido, se producirá en el tercer punto del orden del día del pleno del Consistorio aronero. Al respecto habrá una pregunta en la sesión plenaria. Parte del Grupo del Partido Popular, que le cuestionará a Mena lo siguiente: “¿Cómo piensa garantizar la gobernabilidad y resolver la inestabilidad política que sufre Arona tras ser expulsado definitivamente del que fuera su partido, PSOE, y pasar a ser miembro no adscrito?”.

A partir de la comunicación del secretario del Ayuntamiento se abre una incógnita sobre qué pasará en el gobierno municipal aronero. Hay varias opciones, que principalmente pasan porque Mena consiga, junto a sus seis concejales afines, el apoyo de otras formaciones políticas para seguir gobernando, o que se abra la opción de una moción de censura, en la que los seis concejales socialistas afines a García podrían gobernar con el apoyo de otros partidos, siempre que se considere viable esta alternativa.

El martes, Mena aseguró en una entrevista a Mírame TV que se siente “dolido” con el PSOE por la forma en la que fue expulsado, que consideró “una injusticia”. También dejó claro que su intención es seguir al frente del Ayuntamiento.