De los más de 80.000 turistas que permanecían en Canarias a mediodía de ayer, según anunció el presidente del Gobierno de Canarias, Gobierno de CanariasÁngel Víctor TorresEn una jornada con más de 110 operaciones, de las que casi 60 fueron llegadas, solo una tuvo como procedencia y destino el Aeropuerto Madrid-Barajas Adolfo Suárez, cumpliéndose así la Orden TMA/246/2020, de 17 de marzo, por la que se establecen las medidas de transporte a aplicar a las conexiones entre la península y la Comunidad Autónoma de Canarias. Las disposiciones generales del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana determinan un enlace diario entre ambos aeródromos.

La totalidad (casi) de los aviones llegaron vacíos y partieron repletos de turistas que poblaban el Tenerife Sur desde primera hora de la mañana generando una aglomeración que alcanzó su punto más numeroso a primera hora de la tarde. Situación que se debió, esencialmente, a que los visitantes llegaban con antelación porque también abandonaban antes los hoteles, según argumentó ayer el ministro de Transportes, José Luis Ábalos. A ello sumó, como otra causa de la concentración de pasajeros, que las cafeterías permanecían cerradas, por lo que anunció que el ministerio tomará medidas.

La presencia masiva de pasajeros conllevó el incumplimiento de algunos aspectos del Real Decreto 463/2020, de 14 de marzo, por el que se declara el estado de alarma para la gestión de la situación de crisis sanitaria ocasionada por el Covid-19. Es el caso de la distancia entre personas, a pesar de los reiterados llamamientos realizados a través de la megafonía del complejo.

Desde el Comité de Centros, Luis Cruz explicó que ese es uno de los problemas con los que se encuentra el personal que trabaja cara al usuario, al que también se ha dotado de mascarillas y gel desinfecante. "Pero hay un poco de colapso, porque muchos pasajeros no respetan las normas", apostilla.

24 horas abierto

En todo caso, la operatividad del Aeropuerto Tenerife Sur no ha disminuido, algo que ratifica el sindicalista asegurando que "no ha habido reducción de plantilla en los colectivos a turno, está todo el mundo trabajando ante el escenario de una gran demanda por el retorno de los turistas". De hecho, el recinto aeroportuario de Granadilla de Abona permanece abierto las 24 horas.

La mañana de este jueves las colas en el exterior de la terminal eran notables, especialmente en el margen correspondiente al área de Salidas. Efectivos del Regimiento de Infantería del ejército prestaban apoyo a los agentes de la Policía Nacional mientras seguía el ir y venir de taxis transportando extranjeros que iniciaban el retorno a su país desde la zona turística del sur de la Isla.

Aun así, la tranquilidad fue la tónica en el espacio más masificado de la Isla, después de los hospitales. La terminal del Aeropuerto Tenerife Sur-Reina Sofía fue el último lugar de la Isla que conoció Jennifer, una londinense que lleva en la Isla 10 días y viajó con la incertidumbre de "no saber qué voy a encontrar en mi casa. Mis padres son mayores".

En los mostradores, la aglomeración alcanzaba su máxima expresión y la tensión empezaba a aparecer. "No guardan la distancia ni tienen mascarilla", comentaba un trabajador del aeropuerto mientras su compañera de turno valoraba "el buen comportamiento que hay hoy". Días atrás, "hasta nos amenazaban cuando les pedíamos que respetaran las normas. Es cosa de los nervios. Solo quieren llegar a sus casas". No todos los presentes en la terminal tenían ganas de hablar. Había algunos preocupados porque no sabían si podrían viajar ayer. "Ese es alemán. Ayer estaba aquí. Se llama Klaus". Tuvo suerte. Partió rumbo a Berlín.

La entrada en vigor de las restricciones para el tráfico marítimo y aéreo con la Península y entre las Islas tiene una especial incidencia en el tercer aeropuerto más rentable de la red de Aeropuertos Nacionales y Navegación Aérea. La drástica reducción de la programación a un vuelo diario entre el Tenerife Sur y Madrid-Barajas "tendrá consecuencias". "Lo peor llegará con el turismo cero", reflexiona un trabajador veterano.