Reunión

Igualdad se compromete a apoyar el Pacto de Estado contra los Discursos de Odio

Asociaciones piden la destitución de Isabel García y Redondo se compromete a que "cualquier persona de su equipo que no trabaje por implementar la Ley Estatal LGTBI+" dejará de formar parte del mismo

La ministra de Igualdad, Ana Redondo, en la manifestación por los derechos LGTBIQ+.

La ministra de Igualdad, Ana Redondo, en la manifestación por los derechos LGTBIQ+. / EFE

María G. San Narciso

La ministra de Igualdad, Ana Redondo, se ha reunido durante este martes con distintas organizaciones sociales como primera toma de contacto. Entre ellas participaba la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Trans, Bisexuales, Intersexuales y más (FELGTBI+), que ha informado sobre el compromiso del Ministerio a apoyar el Pacto de Estado contra los Discursos de Odio hacia grupos en situación de vulnerabilidad. Asimismo, algunas asociaciones han aprovechado el encuentro para pedir el cese de Isabel García como presidenta del Instituto de las Mujeres.

En los últimos años, esta responsable ha publicado varios mensajes criticando "el delirio queer" o la "dictadura trans", y se ha mostrado públicamente en contra de la autodeterminación de género que recoge la Ley para la igualdad real y efectiva de las personas trans y para la garantía de los derechos de las personas LGTBI. Mar Cambrollé, presidenta de la Federación Plataforma Trans y una de las representantes que estaban presentes en la reunión, ha hecho entrega a la ministra de una petición con más de 5.500 firmas para pedir su destitución. Para la igualdad real y efectiva de las personas trans y para la garantía de los derechos de las personas LGTBI. Como respuesta, Redondo se ha comprometido a que "cualquier persona de su equipo que no trabaje por implementar la Ley Estatal LGTBI+" dejará de formar parte del mismo.

En este sentido, Urgel Sangil, presidenta de la Federación, ha reivindicado que la ley se reglamente e implemente "a máximos, para garantizar derechos y ejercer como dique de contención contra los recortes del PP y Vox en las autonomías". Algo que ha apoyado el Ministerio.

Según explica Sangil, “el Pacto de Estado contra los discursos de odio es un compromiso político fundamental para frenar el odio que se vierte desde hace años desde las instituciones públicas. Se trata de un odio no solo contra el colectivo LGTBI+, sino también contra personas que viven con VIH, personas con discapacidad, migrantes, personas gitanas o en situación de sinhogarismo, a quienes no podemos dejar atrás”.

Texto suscrito

“Blindar las instituciones públicas contra los discursos que alimentan el odio y señalan a los grupos vulnerables como amenazas es la única vía para reducir la discriminación y las agresiones que estas personas sufren en las calles. Y es que, tal y como indican diversos organismos internacionales, los discursos de odio son las causas y los delitos de odio las consecuencias”, añade.

El pasado marzo de 2023, las organizaciones de la sociedad civil que trabajan por los derechos humanos, así como algunos sindicatos, suscribieron un texto consensuado que esperan que se convierta en el nuevo Pacto de Estado. Estaban, además de la Federación, la Fundación Triángulo, la Asociación Chrysallis, la Fundación ONCE, CERMI, Cesida, el Consejo de la Juventud de España, Red Acoge, CEAR y HOGAR SÍ, así como los sindicatos UGT y CCOO.

El texto suscrito recogía una serie de medidas concretas para adoptar, como la elaboración de campañas de sensibilización; el análisis estadístico de los discursos de odio; la elaboración de un estudio anual del impacto individual y colectivo que tienen estos mensajes en las personas en situaciones de vulnerabilidad; o la formación en materia de discurso de odio en los entornos laborales, al funcionariado, a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, en los centros educativos y en el ámbito sanitario, entre otras.

Más discursos anti-LGBTI en Europa

Según el informe de delitos de odio del Ministerio del Interior, en 2022 los delitos de odio habían crecido un 4,18%. Además, la organización internacional ILGA, que agrupa a más de 1.100 organizaciones dedicadas a lograr la igualdad de derechos entre las personas LGTBIQ+, relaciona directamente el aumento de discursos de odio con el incremento de agresiones.

Lo hace en su último Informe Anual sobre la Situación de los Derechos Humanos de las Personas LGBTI+ en Europa y Asia Central, donde aseguran que este último año han visto "que la violencia se vuelve cada vez más planificada y letal, lo que hace que las personas LGBTI se sientan inseguras en países de toda Europa". "Hemos visto pruebas de que el discurso de odio anti-LGBTI no son solo palabras de líderes marginales o aspirantes a autócratas, sino un problema real con consecuencias nefastas para las personas y las comunidades. Este fenómeno no es solo en países donde abunda el discurso de odio, sino también en países donde se cree ampliamente que las personas LGBTI son progresivamente aceptadas", aseguran.