Efectos de Hermine

La Camerata Lacunensis canta en Agadir para frenar la amargura de quedarse tirados por 'Hermine'

Hasta mediodía de este lunes hubo 92 cancelaciones en aeropuertos de Canarias

Pasajeros en el aeropuerto Tenerife Norte.

El Día

Algunos de los afectados por las cancelaciones de vuelos en los últimos días fueron los 19 integrantes del grupo coral Camerata Lacunensis, de la Universidad de La Laguna (ULL). En su caso, cuando estaban a punto de llegar a Tenerife Norte, tuvieron que regresar al aeropuerto de Alicante. Y a mediodía de este lunes, según su presidente, José Jaime Martín, todavía no tienen claro cuándo podrán regresar a la Isla.

La Camerata Lacunensis participó en la gala de clausura del Encuentro Coral de Ciudad de Torrevieja. De Alicante partieron con casi tres horas de retraso el domingo, a las tres de la tarde, en un vuelo con la compañía Vueling. Pasadas las 17:00 horas, el comandante del avión se puso en contacto con los pasajeros para decirles que tenía una mala noticia y que debían aterrizar en Agadir, ya que era imposible tomar tierra en la pista del Tenerife Norte. En dicho aeródromo marroquí permanecieron cerca de dos horas.

Fue allí, donde les comunicaron que la decisión de la compañía era regresar a Alicante, pues no había ninguna posibilidad de hallar hueco para aterrizar en Tenerife. Además, a los afectados les dijeron que la prioridad era para aquellos vuelos procedentes de destinos más lejanos y que ya no tenían combustible para regresar a sus lugares de partida.

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Ese segundo aviso de que debían regresar a la Península generó un gran pesar y enfado entre muchos de los pasajeros. Y alguna de las personas sufrió una crisis. Y la Camerata Lacunensis hizo lo que mejor sabe hacer: cantar. Sus integrantes interpretaron de forma improvisada dentro del avión la canción cubana El cuarto de Tula, con arreglos de su director, José Herrero. Esa fue la forma que tuvieron de tranquilizar a sus compañeros de viaje y a ellos mismos. En cualquier caso, señalan que el trato de la tripulación fue muy correcto.

José Jaime Martín recordó que Vueling no tiene oficinas en Alicante. Los componentes del grupo coral tuvieron que hacerse cargo de buscar alojamiento y manutención. Y esos gastos serán cubiertos con los fondos del colectivo. Al final se alojaron en un hotel de Santa Pola.

Desde Vueling les han dicho que hasta el viernes no pueden ubicarlos en otro vuelo. Ante dicha circunstancia, una agencia de viajes les ha planteado la posibilidad de hallar plazas en un avión que parte mañana martes de Murcia y llega a Gran Canaria, y desde esta última isla a Tenerife. Su idea es pedir factura de todos los gastos que tienen para después solicitar una compensación a la compañía aérea.

Cancelaciones

Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) informa de que este lunes, hasta mediodía, ha habido unos 92 vuelos cancelados con destino u origen en Canarias, así como seis desvíos. Estos datos se suman a las 619 cancelaciones y 82 desvíos contabilizados durante el sábado y el domingo a raíz de la meteorología adversa generada por el paso de Hermine por las islas.

Miles de personas se han visto seriamente afectadas para comenzar sus vacaciones o para regresar a sus lugares de origen y empezar con su jornada laboral este lunes.

Muchas de ellas tenían como lugar de partida, de destino o de escala el aeropuerto Tenerife Norte-Ciudad de La Laguna, en el que se cancelaron 45 operaciones y se desvió un vuelo. En el aeródromo de Gran Canaria hubo 20 cancelaciones y un desvío.

El tercer aeropuerto más perjudicado fue el de La Palma, con 14 cancelaciones y cuatro desvíos. Le siguieron Lanzarote, con cinco cancelaciones, así como los del El Hierro y La Gomera, con cuatro cada uno.

Fuentes de AENA aclaran que los diversos aeropuertos de Canarias nunca han estado cerrados y, de hecho, en la jornada del domingo hubo 542 operaciones realizadas en las diferentes pistas. Explican que las cancelaciones y desvíos se han debido, de manera fundamental, a la falta de una adecuada visibilidad, más que a precipitaciones torrenciales o fuertes rachas de viento.