Los problemas en la contratación de la seguridad para la tutela de la guardia y custodia de las instalaciones municipales se ha convertido en la piedra de choque entre la concejala de Unidas Podemos Lola Espinosa y el portavoz de CC y responsable del área de Presidencia del Ayuntamiento chicharrero, Alfonso Cabello.

Tras los reproches que se intercambiaron en sesión plenaria, cuando Cabello recriminó a Espinosa de no actuar con lealtad por ocupar una documentación que podría facilitar la búsqueda de soluciones en la relación laboral de la entonces empresa adjudicataria del servicios SH Lanzarote, a lo que la representante de Podemos le aseguró que el escrito había sido registrado y él no se había enterado, este asunto vuelve a enervar la relación entre ambos.

El lunes, Lola Espinosa dijo que es vergonzoso e inaudito que en el pliego de cláusulas administrativas para el futuro contrato de uno de los dos lotes que se licitarán para la adjudicación de la contratación del servicio de seguridad de inmuebles municipales el propio ayuntamiento diferencie entre hombre y mujer, como categoría laboral, además de advertir de que no se subroga a todo el personal de la anterior adjudicataria.

El responsable del área de Presidencia de la Corporación, Alfonso Cabello, considera insólito que la concejala y sindicalista envíe una nota de prensa en la que afirma que en el contrato que regirá desde enero de 2023 y en el que se subrogarán todos los trabajadores actuales diferencia entre hombres y mujeres. «Parece que la señora Espinosa desconoce que el artículo 100.2 de la Ley de Contratos obliga a que en los contratos en que el coste de los salarios de las personas empleadas para su ejecución formen parte del precio total, el presupuesto base de licitación debe indicarse de forma desglosada y con desagregación de género y categoría profesional».

Para Cabello, Unidas Podemos juega a la confusión y al despiste, en vez de ponerse del lado de los trabajadores que buscan su estabilidad laboral.