Elecciones 28M

El PP, sin prisas para un acuerdo con Vox en Cáceres

En Vox esperan una nueva reunión antes de la investidura del sábado. En el PP no la descartan, pero no la ven imprescindible 

Mateos puede ser investido alcalde sin el voto de Vox, no se está condicionado a cerrar ahora compromisos

Rafael Mateos, candidato del PP a la alcaldía de Cáceres.

Rafael Mateos, candidato del PP a la alcaldía de Cáceres. / EP

José Luis Bermejo Trigo

A tres días de la investidura del nuevo alcalde de Cáceres, Rafael Mateos, aún no se ha producido el segundo de los contactos entre el PP y Vox. En Vox dan por hecho que tiene que producirse esa segunda reunión y que, a diferencia de la primera, no debería ser solo un ‘café’ como el del 1 de junio entre el candidato del PP y futuro alcalde y el portavoz de Vox, Eduardo Gutiérrez. En el PP no se descarta que se produzca ese segundo encuentro antes del pleno de investidura del próximo sábado y se considera que no se trataría de una reunión informal porque de lo que se habla es del futuro de Cáceres. No obstante, en el PP no hay prisa en que se cierre un pacto o acuerdo con Vox, que se podría producir con la legislatura iniciada, y se recuerda que no se está en la misma situación que en las elecciones de 2015 y 2019, cuando sí era necesario llegar a ese compromiso porque del mismo dependía la elección del alcalde.

PP y Vox sí están acelerando los acuerdos en aquellos municipios en los que el PP necesita los votos de Vox para obtener la alcaldía porque su candidatura no ha sido la más votada. El primer ‘gran’ ayuntamiento en el que se ha cerrado ese acuerdo ha sido este martes en Elche, con Vox dentro del gobierno local. En Guadalajara también hay un principio de acuerdo entre las dos formaciones políticas, según avanzó el pasado lunes el secretario general de Vox, Ignacio Garriga, que puntualizó que son 135 municipios en España en los que son necesarios acuerdos entre el PP y Vox al no ser la lista del PP la más votada y requerir de los ediles de Vox para obtener la mayoría absoluta en la votación de la investidura del alcalde.

El caso de Cáceres es distinto al no necesitar el PP los votos de los dos concejales de Vox en la investidura. Los populares gobernarán en minoría, con sus once concejales. Pero en la votación de cuestiones en las que a lo largo del mandato se necesite de mayoría absoluta, como la aprobación de los presupuestos o las modificaciones del planeamiento, sí va a depender de los dos votos de Vox. También en materias que puedan salir con mayoría simple y en las que una abstención de Vox podría provocar que los votos del PSOE y Unidas Podemos hagan perder más de una votación al gobierno en minoría de Rafael Mateos.

La prioridad ahora en el PP es la toma de posesión del sábado, el traspaso de poderes (a diferencia de lo que está pasando en otros ayuntamientos en los que ya se han hecho públicos los contactos previos entre el alcalde saliente y el entrante, en Cáceres todavía no se habría producido ese encuentro), la formación del gobierno (desde la investidura hay un plazo de cinco día hábiles para la constitución de los grupos políticos) con la junta local de gobierno, distribución de delegaciones y liberaciones. Una vez dados estos pasos y con la maquinaria municipal en marcha, se dialogará. No hay prisa en el PP para llegar o cerrar un acuerdo con otra formación política que dé mayor estabilidad al gobierno (solo podría ser con Vox) porque, en caso de producirse, lo que se pretende es que sea "un buen acuerdo".

En Vox sí quieren que antes de la investidura se pongan sobre la mesa condiciones o compromisos para conocer en qué escenario se van a mover, incluso un pacto o acuerdo. Y recuerdan que en el PP no pueden pensar que van a contar siempre con su voto cuando lo necesiten. La pretensión en Vox sigue siendo entrar en el gobierno local, algo que Mateos ha descartado, en las dos últimas semanas ya ha mantenido encuentros con lo diez concejales que formarán su equipo de cara a la formación del gobierno municipal.

Hace cuatro años, cuando se negociaba la investidura de junio de 2019, los contactos se centraron en la designación del alcalde. Al final hubo gobierno en minoría, con el socialista Luis Salaya a la cabeza. Se mantuvo en minoría y no fue hasta casi febrero de 2020, medio año después de la investidura, cuando se firmó un pacto para la legislatura con Unidas Podemos que dio mayor estabilidad al gobierno socialista en minoría. 

[object Object]

Castellón: PP y Vox con negociaciones abiertas

En Castellón de la Plana el resultado es parecido al de Cáceres. El PP ganó las elecciones, pero sin mayoría absoluta, con once ediles en una corporación de veintisiete, además los dos partidos de izquierdas, PSOE y Compromís, suman un concejal más que el PP. La popular y futura alcaldesa, Begoña Carrasco, puede ser investida sin el voto de Vox, pero a lo largo del mandato necesitará de los cuatro ediles de Vox para ganar votaciones. Los populares no han abierto el gobierno a Vox ni dan por hecho que pueda haber un pacto o acuerdo antes de la investidura, pero ya ha habido un encuentro de los equipos negociadores de los dos partidos y Vox ya ha trasladado un primer documento al PP que contempla una bajada de los impuestos, según informa el diario Mediterráneo, del grupo Prensa Ibérica.

Valencia: gobierno en minoría y con acuerdos puntuales

En Valencia el PP ganó las elecciones con trece concejales, pero la suma de los ediles de los dos partidos de izquierdas, que no logran mayoría absoluta, sí son más, dieciséis en una corporación de treinta y tres. La popular y futura alcaldesa, María José Catalá, no necesita a Vox para la investidura, pero sí para sacar adelante decisiones que requieran de una mayoría absoluta. Catalá, en informaciones recogidas el pasado domingo por el diario Levante, seguía sin hablar con Vox a menos de una semana para la investidura, y este martes, según la noticia publicada por el mismo diario del grupo Prensa Ibérica, continuaba manteniendo su postura inicial de un gobierno en minoría del PP, sin los cuatro concejales de Vox, y en alcanzar durante el mandato acuerdos puntuales cuando se necesitasen. Catalá sí había mantenido ya el pasado lunes una reunión con el alcalde saliente, Joan Ribó, para preparar el traspaso de poderes.