Candidato a la secretaría general de Ciudadanos

"Es la hora de dar el do de pecho para que Cs vuelva a ser decisivo, porque no hay plan B"

"El PP cree que se puede mercadear con las actas; no tememos que concejales o diputados nuestros en Asturias se pasen a un partido así", asegura Adrián Vázquez

Adrián Vázquez, candidato a la secretaría general de Ciudadanos.

Adrián Vázquez, candidato a la secretaría general de Ciudadanos.

Juan A. Ardura

Es el candidato de la lista que disputa el liderazgo de Ciudadanos a Edmundo Bal. El eurodiputado Adrián Vázquez (Madrid,1982), junto a la coordinadora balear, Patricia Guasp, aspira a "reflotar" un partido que ha caído en picado en los últimos procesos electorales y encuestas, defendiendo su vocación liberal y con el compromiso de pactar indistintamente con PSOE o PP para, llegado el caso, arrinconar "a los populismos y a los nacionalismos".

–¿Cómo valora el plan de Alberto Núñez Feijóo de ofrecer a la dirección de Ciudadanos que salga de este proceso interno la incorporación al PP?

–Es una propuesta muy en la línea de lo que es el PP. Piensan que se puede mercadear con los valores y que las actas de diputado o concejal son de quien las venda a un precio más alto, como han estado haciendo en los últimos meses. No aceptamos esa oferta, que no me sorprende porque los tránsfugas no les molestan en su historia como partido. Pero ser liberal no es lo mismo que ser conservador.

–¿A qué se refiere?

–Promover y defender las libertades personales que cada uno pueda vivir, o tener una familia del modelo que sea es muy liberal y es todo lo contrario a ser conservador. Entendemos que nuestro país necesita una reforma profunda de las instituciones, como el sistema de las pensiones que está en bancarrota. No se puede utilizar a las instituciones o a unos nichos de población como herramienta electoral.

¿Teme que algún concejal de Ciudadanos en el ayuntamiento de Oviedo o que algún diputado regional se vayan al PP para las elecciones del 28-M?

–No, la gente que es de Ciudadanos nunca daría el salto a un partido que tiene ese historial con la corrupción, ni se iría a un partido conservador que no entiende la libertad personal como la libre elección de cualquier tipo de familia, o que mercadea con la composición de las instituciones.

–¿Por dónde pasa la reflotación de Ciudadanos?

–El proyecto que defendemos Patricia Guasp, yo y otros tantos compañeros consiste en hacer un cambio radical de caras, algo muy importante, por eso en nuestra propuesta somos todos gente nueva. Pero sin dilapidar el talento que tenemos en las instituciones. También defendemos un cambio radical en la forma de hacer las cosas. En Ciudadanos hemos muchas cosas bien, pero también es cierto que en los últimos años algunas decisiones nos han hecho mucho daño y nos han llevado a una situación muy delicada. Tenemos que dar una vuelta completa al partido en 45 días para volver a ilusionar a los españoles y ser una herramienta útil en las elecciones de mayo, que son la clave.

–¿Por qué perdió Ciudadanos el apoyo en las urnas, cuáles son esos errores de los que habla?

–El contexto político no ha ayudado, pero un error que se cometió fue el de hacer solo pactos autonómicos con el PP tras las elecciones de 2019. No estuvo bien. Somos un partido liberal y lo que no vamos a hacer en encapsularnos en pactar solo con la derecha o solo con la izquierda. Nuestra candidatura se compromete a pactar, donde podamos ser decisivos, sobre la base de nuestro programa y no nos vamos a plegar ni a derecha ni a izquierda. Otro error claro fue la moción de censura en Murcia, porque no entendimos el contexto social de que la gente quería estabilidad en las instituciones y no hacer juegos malabares en un lado o en otro. Ese tipo de errores no van a volver a cometerse.

–¿Fue un error la gestión de la victoria en Cataluña en 2017?

–De aquella victoria hay que estar muy orgullosos en un momento en el que había un ataque al Estado, a los valores de 1a Constitución y a los europeos. Pero las mayorías parlamentarias son la suma de unas mayorías simples y nosotros no la conseguimos. No entiendo muy bien esa leyenda de que Ciudadanos no hizo nada con su victoria, cuando era una cuestión de una mayoría parlamentaria que no se dio para poder gobernar.

–¿La sombra de Inés Arrimadas es alargada?

–No, Inés Arrimadas es una gran oradora y una gran parlamentaria, como demuestra todos los días en el Congreso. Ella ha dado un paso a un lado, no va a estar en esta ejecutiva permanente y seguirá siendo portavoz en el Congreso porque es una de las mejores no solo del partido sino del arco parlamentario español. Como decía antes, no estamos en Ciudadanos para desperdiciar talento. Una cosa será quien marque la pauta política del partido, que lo haremos desde la nueva comisión permanente, si ganamos, y otra muy distinta es la representación institucional.

¿En qué se diferencia su programa del de Edmundo Bal?

–No se pueden hacer las cosas como se hacían antes con Edmundo Bal, que ha sido el número dos del partido coincidiendo con nuestro peor ciclo electoral. Otra diferencia es que nuestro objetivo son las elecciones municipales y autonómicas de mayo, mientras que el señor Bal está más interesado en autoproclamarse candidato a las elecciones generales que todavía no sabemos ni cuándo son. Nuestra candidatura es la de la regeneración, no somos cesaristas. Es la hora de dar el do pecho para que este partido vuelva a ser decisivo, aquí no hay un "plan b". Y si no lo conseguimos, vamos a dejar huérfanos a miles de asturianos y españoles, que solo van a tener al bipartidismo, los populismos o los nacionalismos.

¿Cómo ve al partido en Asturias?

–La situación en Asturias no es muy diferente a la de otros territorios. En el Ayuntamiento de Oviedo y en las instituciones en las que estamos, hemos demostrado que los cargos de Ciudadanos trabajan. Pero tenemos que volver a lograr que nuestra marca sea competitiva. En febrero, nuestra candidatura se compromete a hacer primarias para que los afiliados asturianos decidan quién les representará.

Suscríbete para seguir leyendo