La Palma

Detectan por primera vez una lapa en la nueva fajana del Tajogaite

Investigadores de la ULL del grupo de investigación BotMar dan fe del hallazgo en la novena campaña de monitoreo en Tazacorte

Un investigador utiliza un escalímetro para medor el tamaño de la lapa.

Un investigador utiliza un escalímetro para medor el tamaño de la lapa. / ED

El Día

El Día

El grupo de investigación BotMar de la Universidad de La Laguna, en la novena campaña de monitoreo de la biodiversidad de los deltas lávicos del volcán Tajogaite, ha detectado la primera lapa de sol (Patella piperata) dos años después del cese de la erupción en la fajana.

El hallazgo ha sido hecho público por Carlos Sangil Hernández, uno de los integrantes del grupo. En su publicación señala que se trata de «una pequeña novedad que nos enseña que las dinámicas de algunas poblaciones de organismos es lenta e incluso frágil». Además, indica que «seguimos generando conocimiento para el manejo de nuestros ecosistemas». Según un estudio llevado a cabo en los nuevos fondos marinos por el grupo de científicos del grupo BotMar-ULL, la erupción del volcán Tajogaite ha creado un nuevo ecosistema, «un laboratorio natural ideal para el estudio de procesos ecológicos, muchos de los cuales no pueden reproducirse en condiciones controladas de laboratorio».

Nueva publicación

El estudio se incluye en el libro Tajogaite, enseñanzas de una erupción volcánica (La Palma, otoño 2021) del Instituto de Estudios Hispánicos de Canarias, que fue presentado en la XVIII Semana Científica Telesforo Bravo. En el se aporta que las investigaciones en los deltas lávicos tienen como objetivo principal evaluar el impacto de la erupción sobre las comunidades de organismos bentónicos, estudiar los procesos de colonización y sucesión a corto y medio plazo, y determinar a largo plazo la evolución de todo el ecosistema.

En el estudio se desvela que la sucesión primaria se ha podido estudiar de forma temprana, apenas dos meses después del final del proceso eruptivo, y ha incluido diferentes grupos de organismos, lo que nos ha permitido tener una visión amplia de la formación de un ecosistema.

Algunos organismos colonizaron las coladas de lava más rápido que otros, «la capacidad de movilidad de los peces fue una ventaja que les permitió llegar primero y evolucionar rápidamente hacia comunidades clímax», señala. El resto de comunidades de organismos estudiadas, invertebrados y algas, han evolucionado más lentamente. Sólo en las algas encontramos un reemplazo de especies a través de la sucesión, mientras que, en peces e invertebrados, las especies que colonizaron primero las coladas de lava fueron esencialmente las mismas que estaban presentes en la zona de control.