Cuatro décadas de convivencia sostenible

Han pasado ya 40 años desde que se iniciara el proceso para que el territorio de La Palma recibiera el reconocimiento de Reserva Mundial de la Biosfera por parte de la UNESCO. Fue en el año 1983 cuando se convirtió en la primera isla española en contar con el reconocimiento internacional de Reserva de la Biosfera, al menos para una parte de su territorio, la Finca El Canal y Los Tiles, una muestra especialmente bien conservada de la laurisilva canaria, bosque relicto de la Era Terciaria.

En 1998 se ampliaba el territorio declarado inicialmente con la integración del arco noreste de la Isla, pasando a tener bajo esta consideración el 19,67% de la superficie insular, hasta que el 6 de noviembre de 2002, después de dos años de intenso trabajo de un equipo ya confirmado, la totalidad del suelo insular se declara Reserva Mundial de Biosfera, incluyendo además dos Zonas de Especial Conservación (ZEC) Marinas, una de las cuales alberga una Reserva Marina de Interés Pesquero.

Ahora se conmemora esa efeméride que ha permitido desarrollar cuatro décadas de trabajo liderando proyectos y una filosofía de vinculación del ser humano y sus actividades con la necesaria concienciación y protección del medio ambiente, así como trabajar en la gestión común de los aspectos medioambientales y de desarrollo socioeconómico, sumando además la investigación y la observación permanentes.

La Fundación Canaria Reserva Mundial de la Biosfera La Palma sigue liderando el proceso de reconversión hacia un territorio sostenible, ofreciendo una manera diferente de hacer compatible el turismo con nuestra diversidad rural y cultural, a través de iniciativas internacionales, siendo un importante partícipe del proyecto MaB (Man and Biosphere-Personas y Biosfera), además de su `resencia en foros nacionales e internacionales. También ha sido pionera en la Isla al propiciar la participación ciudadana en todos sus procesos, así como en la creación de una marca propia vinculada a sectores como la restauración, el turismo o la artesanía.

Divulgación

Los actos de este aniversario se han concentrado en Los Cancajos, en Breña Baja, donde la Fundación Canaria Reserva Mundial de la Biosfera La Palma ha organizado una feria con actos culturales y musicales, además de espacios de divulgación del trabajo artesano.

El presidente del Cabildo palmero, Sergio Rodríguez, puso de relieve el papel de la Reserva Mundial de la Biosfera en la gestión social y territorial de la Isla, un modelo de convivencia sostenible, ejemplar para otros lugares.

A propósito, destacó que La Palma fue la primera isla española en recibir este reconocimiento, consolidando «el compromiso con el medio» y permitiendo desarrollar un espacio para impulsar proyectos y programas que se consideran adecuados para la conservación, la investigación científica y la aplicación de modelos de desarrollo sostenible.

La celebración de este 40 aniversario posibilita, además, seguir trabajando «con el firme propósito de preservar y promover el equilibrio entre el ser humano y la naturaleza», añadió el presidente, quien aprovechó para felicitar y reconocer la labor de todas las personas, instituciones y organizaciones que han contribuido con dedicación y esfuerzo, «al mantenimiento de una entidad ágil, moderna y comprometida, que ha logrado avances significativos en la conservación del territorio, el desarrollo de una economía responsable y en la promoción de prácticas sostenibles».

Todo ello, incidió, permite que la Reserva de la Biosfera La Palma «sea reconocida como un modelo de excelencia a nivel nacional e internacional», marcando el trabajo para que la Isla siga afrontando «retos y desafíos importantes, siendo el más reciente y acuciante el de la recuperación tras la erupción volcánica».

Rodríguez subrayó que se mantiene intacto el compromiso de fortalecer la gestión integral de la Reserva Mundial de la Biosfera La Palma, «para que continúe siendo una institución responsable, transparente y comprometida que preserve, proteja y promueva un modelo de convivencia sostenible».

La Reserva de la Biosfera de La Palma también juega un papel importante en el proceso de recuperación, gestionando directamente una subvención ministerial de 15 millones de euros que está permitiendo actuar con acciones orientadas al desarrollo socioeconómico y ambiental de la Isla.

Esta figura juega un papel importante en el proceso de recuperación de la Isla tras la erupción

Esa inversión permitirá el fortalecimiento de la red contra incendios forestales y abastecimiento en altura en los municipios de El Paso y Fuencaliente, así como la apuesta por la energía limpia y sostenible y la mejora y recuperación de la red de senderos y miradores.

El programa cuenta con cuatro ejes de actuación, el primero de ellos con seis millones, dirigidos a la restauración y desarrollo de los recursos hídricos, especialmente en la zona afectada por la erupción, con varios proyectos de mejora de redes, saneamiento, reparación de fugas y generación hídrica a través de capta-nieblas, destacando el proyecto de una red contra incendios forestales y abastecimiento en altura en los municipios de El Paso y Fuencaliente.  

El segundo eje, orientado a la restauración y desarrollo de la energía, fomentando la sostenibilidad y el avance en el desarrollo de una energía más sostenible y limpia, con 3,5 millones de euros.

El tercer eje cuenta con un presupuesto de casi cinco millones de euros y se centrará en la recuperación y mejora de los senderos, miradores y los paisajes, favoreciendo un desarrollo sostenible del sector turístico en el que destaca un proyecto integral de intervención en la Red Insular de Senderos, especialmente en las zonas afectadas por la erupción.

La últimas de las líneas dispone de un presupuesto de 500.000 euros, se concretará en acciones de apoyo a la producción, promoción y comercialización de la economía local palmera y la eficiencia de sus recursos.

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