Se ultiman los trabajos de la tubería que conducirá agua a Las Hoyas y El Remo

La tubería que debe transportar agua a Las Hoyas y El Remo, construida por encima de la fajana generada por el Tajogaite y promovida por el Cabildo de La Palma, entra en su fase final de ejecución, en contra de la oposición de la Demarcación de Costas y a pesar de que pesa sobre ella un expediente sancionador. Los trabajos han continuado, con la previsión de que la obra se concluya en el mes de febrero, estando su actual estado de ejecución en torno al 90%.

El responsable insular de Aguas, Carlos Cabrera, destacó que actualmente «hay una propuesta económica considerable de sanción», no descartando acudir a los tribunales en el caso de que prospere. Desconoce cual puede ser el futuro de ese expediente, pero confía en que al final el proceso concluya con la concesión de la autorización para una intervención que está a punto de terminar. Considera también Cabrera que se trata de un tema que «con un poco de voluntad técnica, jurídica y política se solucionará», pero apostilló que sea cual sea el resultado, «la infraestructura se va a quedar ahí».

En esa misma línea, el presidente del Cabildo, Mariano Hernández Zapata, incidió en que «le hemos hecho saber, incluso al presidente Sánchez, que no íbamos a parar nunca esta infraestructura, ya que es la única posibilidad de hacer llegar el agua a la costa del Valle de Aridane».

Pero lo cierto es que ni tan siquiera los borradores de reconstrucción de la Isla, que se han dado a conocer en estos días, contemplan esta infraestructura. Así lo confirmó Cabrera, quien hizo hincapié en su preocupación por el «exceso de protección» que a a su juicio hace que «nos olvidemos de infraestructuras vitales e importantes para la Isla».

Además, reclamó que «esa infraestructura no puede quedar fuera de la ordenación» y recordó que el Cabildo ha tenido que tramitar expedientes para la instalación de desaladoras «que no contaban con ningún tipo de autorización de Costas, y ahí están».

Esta infraestructura, que se ha realizado por la vía de emergencia con empresas palmeras y que cuenta con una inversión de 5,5, millones de euros, va a contar con una longitud de nueve kilómetros, de ellos 1.700 metros sobre la fajana, y transportará 1.500 metros cúbicos por hora.

Protección de las coladas

En contraposición a esta obra, el Instituto Geológico Minero de España (IGME) reclama que se preserve la zona de coladas al sur de la montaña de Todoque, junto al acantilado a cuyos pies se formó la primera fajana, por su «alto valor científico». Así lo han planteado la directora general del IGME, Ana María Alonso, y la investigadora científica titular de la unidad territorial de Canarias, Nieves Sánchez, tras reunirse con el comisionado especial de la reconstrucción de La Palma, Héctor Izquierdo.

Esa zona en concreto, la más productiva para el cultivo de plátano de toda la isla, es a su vez «una unidad estructural geológica completa, donde todas las lavas que discurrían desde el volcán han bajado por el acantilado», ha descrito Nieves Sánchez.

La científica detalló que el IGME ha realizado un inventario de lugares de interés geológico generados con la nueva erupción siguiendo una metodología en la que se valora el carácter científico, educativo, cultural, turístico y de divulgación. Y en base a ese trabajo se han identificado dos zonas de coladas que habría que proteger: por un lado, la del acantilado en el que se formó la primera fajana, y también el entorno del cono del volcán.

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