El periódico EL DÍA se viste de gala desde hoy con una imagen actualizada, fácilmente reconocible para los incondicionales desde la década de los años 80, cuando esta tipografía presidía aquellas primeras páginas.

Cuando se anuncia un cambio de diseño se puede entender como una revolución conceptual que provoca un radical cambio de imagen. En el caso de EL DÍA, es una transformación cuidada, en muchos casos tan sutil que puede pasar inadvertida, pero que en su conjunto logra una precisa armonía entre la información y su presentación.

EL DÍA recupera, en esta nueva cabecera, los rasgos de una vieja conocida con la que reivindica la esencia del periodismo con el que generaciones de tinerfeños y canarios se han identificado durante casi 110 años de historia.

El periódico se presenta desde hoy con una reordenación de las secciones, que establece una nueva narrativa con otro orden jerárquico para facilitar la lectura

Es un paso hacia el futuro sin perder de vista nuestras raíces. Un cambio del periódico de toda la vida, con los valores que demandan los lectores, nuestra razón de ser, dando respuesta a la expectativa cultivada durante décadas.

La cabecera luce desde hoy robusta y densa, adecuada a la demanda gráfica actual y antesala de los contenidos que se presentan a lo largo de cada edición. Fiel a los rasgos que aparecen en la fachada de nuestra sede en el número 71 de la avenida de Buenos Aires, en la capital tinerfeña. Se trata de un diseño vivo, ágil, dinámico y limpio que aspira a sorprender al lector y a facilitar la lectura y su degustación.

Los lectores advertirán desde hoy que el cambio más importante respecto al diseño con el que acudimos ayer al quiosco es precisamente el diseño de la portada que enarbola la cabecera, una mancheta que al verla la habrá identificado como al amigo de siempre. Y no por casualidad, sino fruto de un estudio para llegar a EL DÍA que, como un sello de calidad, acuña la primera plana del periódico, fácilmente identificable porque atesora los valores de siempre con los que el lector vincula la esencia del ejercicio periodístico que nos ha distinguido como el diario líder de Canarias en lectores, según el último Estudio General de Medios (EGM).

Con la imagen de siempre en la retina, el periódico se presenta desde hoy con una reordenación de las secciones, que establece una nueva narrativa con otro orden jerárquico para facilitar la lectura; trasladando las dos señas de identidad del diseño de la cabecera -robusta y densa- a la presentación de las noticias y el peso de las informaciones.

Desde la cercanía al lector se mantiene la tipografía que resulta familiar, si bien adecuada a los nuevos tamaños y formas requeridos para las renovadas dimensiones de las noticias, más amplias, que apuntalan con un exquisito uso de la imagen.

La identidad del medio se combina con cambios sutiles que comienzan hoy y que evolucionarán conforme se sucedan las diferentes ediciones hasta convertir en algo cotidiano el matrimonio que forma una presentación atractiva de la información con enfoques familiares o cercanos.

No estamos ante un cambio revolucionario. No es un renovarse o morir. Es una evolución tranquila. Sutil. El lector disfruta desde hoy de la reivindicación de la imagen corporativa de EL DÍA, como el icono con el que se identifica Tenerife. Como el Teide. Y que ha fidelizado a los lectores durante décadas. Ese es nuestro compromiso. Asumimos el reto.