Consciente de que sus problemas para liquidar los partidos pasan por su evidente sequía goleadora (ningún gol en sus primeros tres compromisos ligueros), el Racing trabajaba anoche a destajo en la incorporación de futbolistas ofensivos. Tras hacerse con los servicios de Jordi Mboulá –descarte del RCD Mallorca al que también seguía el representativo isleño–, su siguiente movimiento en este sentido ha sido el principio de acuerdo para la incorporación de Sekou Gassama, también proveniente de la máxima categoría y al que conocen bien en el Tenerife. No en vano, el cuadro chicharrero lo sufrió en sus carnes cuando militaba en el Fuenlabrada.

Con la llegada de Sekou, hermano de la pivote de la selección española de balonmano Kaba Gassama, el cuadro técnico cántabro tendrá ya cuatro especialistas para la demarcación de delantero centro: Matheus, Cedric, Peque y el propio Sekou.

El nuevo jugador racinguista –ayer faltaba cerrar los últimos detalles previos a su contratación– destaca por su potencia física y juego aéreo, aunque no se trata de un jugador técnicamente muy dotado. El Racing se ha decantado por su perfil por ser complementario al de los otros tres atacantes en nómina y podría permitir a Guillermo Fernández Romo, si lo quisiera, organizar un fútbol más directo y jugar con dos arietes en su venidera visita al Heliodoro.

«El domingo vi a mi equipo muy activo, intentando obtener ventaja del robo, llevando la pelota a nuestros delanteros... pero esto va de meter goles y no hemos hecho ninguno», avisa el técnico.