Juan Carlos Cordero, director deportivo del CD Tenerife, afronta su temporada alta de trabajo con la toma de decisiones trascendentales para el nuevo proyecto. Deberá avanzar en las negociaciones con Luis Miguel Ramis, además de decidir sobre la continuidad de varios futbolistas que finalizan contrato el 30 de junio. También tiene ante sí la posibilidad de iniciar las gestiones para intentar que continúen algunos de los cedidos o escoger entre los canteranos, tanto los que se han marchado a préstamos como aquellos que harán la pretemporada con los mayores.

El entrenador.

Ramis es el elegido. Esa decisión no ha cambiado. De hecho, las conversaciones han comenzado y el objetivo sigue siendo el de anunciar la renovación del cuerpo técnico desde que se consiga la salvación. De ganar a la UD Almería, incluso podría producirse la próxima semana esa comunicación. La intención es dar naturalidad a una decisión basada en la trayectoria, más que en los últimos partidos.

Se entiende que el actual preparador blanquiazul es el adecuado para comandar el próximo proyecto después de observar cómo fue capaz de hacer reaccionar al equipo en diciembre. De él se valora su versatilidad para adaptarse a los mimbres que tenía y el conocimiento del entorno. Una palabra sobrevuela, además, las oficinas del Heliodoro: estabilidad.

Los capitanes.

Con Aitor Sanz y Dani Hernández renovados, quedan dos incógnitas por despejar: Carlos Ruiz y Suso Santana. El central granadino, ahora lesionado, ha jugado 22 partidos y acumula 1.571 minutos. Se ha convertido en fijo con Ramis en el centro de la zaga y se ha ganado, a base de rendimiento, su continuidad en el CD Tenerife. Solo los prejuicios respecto a su edad (38 años en julio) pueden jugar en su contra.

El caso del primer capitán es más complejo, puesto que su participación en el presente curso ha sido residual. Con 36 años y mucha competencia con contrato en su demarcación, el de Taco se ve enfilando la puerta de salida. Su renovación se entendería en clave de jefe de vestuario, porque su coste no es alto y para que cumpla el sueño de llevar el brazalete en el centenario.

Cedidos.

La opción de compra que el CD Tenerife tiene sobre Giovanni Zarfino es de difícil cumplimiento. Está relacionada también con un hipotético ascenso de los insulares que no v a a producirse. No obstante, el próximo fin de semana se juega una jornada decisiva. El Extremadura no depende de sí mismo para meterse en el playoff de ascenso. De no lograrlo, seguiría prevaleciendo la cláusula liberatoria del contrato. Esto permitiría repetir cesión. La duda es si Cordero considera al uruguayo una pieza importante en el próximo proyecto para asumir su coste. Con 22 encuentros disputados y 1.400 minutos, Gio está lejos del peso que se le suponía. Las lesiones lo han impedido.

El caso de Fran Sol depende menos de la entidad blanquiazul, ya que será el Dinamo de Kiev el que tome una decisión al respecto. Con contrato en vigor en la escuadra ucraniana, esta podría decantarse por que el atacante de Vicálvaro se quede en su disciplina. La alternativa pasaría por una puja entre los candidatos a hacerse con el delantero en la que primarían los intereses económicos. El jugador, encantado de vivir en la Isla, solo pediría ciertas garantías de competir por objetivos más ambiciosos. Aun estando en manos del Dinamo, convencerle a él no sería tarea complicada.

El tercero en discordia de esta lista sería Bruno Wilson, que tampoco ha terminado de explotar como se esperaba. También limitado por varias lesiones, el luso estará pendiente de lo que decida el Braga. En el Tenerife se le ve margen de crecimiento, pero el coste puede ir en su contra.

Hacer caja.

Otro de los asuntos que debe manejar Cordero en estos meses será el de alguna salida en forma de traspaso que permita mantener el tope salarial en condiciones similares a las de esta temporada. Aunque se espera un alza con el regreso del ticketing (entradas+abonos), la incertidumbre en este apartado puede conllevar un cálculo conservador por parte de LaLiga. Los cinco millones de euros ingresados por Luis Milla entran ya en la media que calcula los ingresos por esta vía, con lo que traspasar a algún futbolista resultaría beneficioso. Álex Muñoz, que ya ha contado con ofertas de Primera y al que solo le restaría una campaña de contrato, sería el principal candidato.

También tienen cierto cartel Shaq Moore y Sam Shashoua, pero la intención del director deportivo blanquiazul es mantenerlos al menos una campaña más. En el caso del inglés, se le ha realizado una propuesta para mejorar sus condiciones contractuales.

Canteranos.

Elliot Gómez parece el cedido con más oportunidades de regresar. Para Josué y Adri Herrera se espera una nueva cesión. Peor lo tienen Otaño, Fede Olivera y Borja Llarena. Además, parece segura la presencia de Víctor Méndez, Ethyan, Dylan o Cherno en la pretemporada. Pero habrá otros. Los lesionados (David e Ibra) deberán esperar.