Con la permanencia como objetivo inicial en su debut en la Liga EBA, el CB La Matanza ha saldado la primera fase con una abrumadora solvencia. Ahora van sin presión. 

Independientemente de luchar por algo más que la salvación, ¿se esperaban acabar la primera fase terceros con un balance de 9-5?

No, para nada. Pensábamos que en este primer año íbamos a sufrir bastante para mantener la categoría, por lo que para nosotros ha sido una sorpresa acabar de esta manera la primera fase de la temporada.

¿Hasta qué punto ha sido importante contar con el apoyo de la CBA para realizar un buen papel?

Ha sido de una gran ayuda. Se trata de una academia de alto rendimiento que nos aporta algunos jugadores y nos hace subir el nivel de los entrenamientos y la preparación de los partidos. Uno de ellos es Revelinio Tholel, un holandés que ya estuvo en la CBA en júnior, que hace un mes acabó su temporada con la Slippery Rock University, y que se ha ofrecido a jugar este final de curso con nosotros.

¿Puede ser en esta segunda fase el ir sin presión el mejor argumento del CB La Matanza?

Sí, seguro que será un aspecto que nos favorecerá. Somos el presupuesto más bajo de nuestro grupo, y una vez hemos logrado el objetivo de seguir en la categoría un año más, todo lo que venga a partir de ahora será un regalo.

¿Ve a su equipo con opciones de hacer algo importante o pelear por el ascenso son palabras mayores?

Ahora mismo sí, aunque si el grupo sigue mejorando no vemos descabellado que algún año podamos optar a cotas mayores.

Sus rivales serán el Fuenlabrada y el CD Estudio. ¿Hasta qué punto es importante haber evitado al Real Madrid?

Mucho, porque pienso que el Real Madrid es el equipo más fuerte de nuestro sector y haberlo evitado para nosotros es una gran ventaja. Pero no podemos olvidar que el Fuenlabrada ha quedado primero en su grupo haciendo buen baloncesto y siendo un equipo batallador y con un juego alegre en una apuesta por la gente joven. Será un duro rival, como también lo consideramos al Estudio, que quizá será más parecido a nosotros. Creo que tendremos cuatro partidos muy disputados.

¿No le da pena que, en el primer año en categoría, su afición no haya podido disfrutar de las victorias del equipo como las logradas contra el Náutico y el Real Madrid?

La verdad que, con la afición que tiene La Matanza, es una pena que no puedan venir al pabellón. Aquí se vive muy de cerca el baloncesto y hay que admitir que todo el pueblo se ha volcado con el equipo, tanto las empresas privadas como el Ayuntamiento, que es el máximo patrocinador del equipo. Una muestra de este apoyo es que en el último partido de la primera fase sí pudimos meter el 20 por ciento del aforo y las 160 entradas disponibles se agotaron en pocas horas. Es una lástima porque estoy convencido de que en estos dos próximos partidos hubiera habido lleno absoluto.

Hay varios jugadores en su plantilla que llaman la atención. Uno de ellos es Lalo Pirela. Parece que, pese a su edad, la categoría ya se le queda corta...

Ahora está lesionado, pero creemos que volvera para el primer partido de la segunda fase, al igual que Martín Calvo. Su techo está mucho más arriba de la Liga EBA, y si no me equivoco en unos cuantos años estará jugando en ACB.

¿Tan arriba?

Sí, estoy convencido. En esta vida no se puede asegurar nada, pero por su nivel, su sacrificio, su empeño y una mentalidad superior a su edad, lo puede lograr. Confío que llegará. En su momento dije que Brancou Badio llegaría lejos y ahora está en el Barça, pues de Lalo opino lo mismo.

¿Cree que acabar la temporada con muy buen papel puede poner el listón demasiado alto y ser contraproducente para el curso que viene en lo que a exigencia se refiere?

No pienso que sea así. Ahora intentaremos que un municipio que no llega a 9.000 habitantes como La Matanza y también el Norte de la Isla disfruten de un equipo en categoría nacional porque es un orgullo para todos, y si podemos alcanzar metas mayores pues no parar hasta lograrlo.

¿Pero se ven con opciones reales de asentarse en una categoría superior?

Creo que si mantenemos la unión con la CBA y seguimos haciendo las cosas igual de bien que hasta ahora, formando jugadores para que salten al primer equipo, pienso que en unos años podríamos estar en condiciones de aspirar a una categoría superior. No renunciaríamos a ello, pero ahora mismo nuestro propósito pasa por mantenernos en la EBA muchísimos años. Ser un referente en el Norte de la Isla como club que apuesta por la cantera y por hacer las cosas bien.