Preocupante derrota del Sanaya Libby’s Haris. Más que por las connotaciones clasificatorias, por las sensaciones que transmite un equipo que anda irreconocible después del parón navideño. El conjunto tinerfeño no pudo hacerle frente a un combativo CV Sant Cugat, que se valió de un agresivo saque para imponerse a las blanquiazules con contundencia (3-0).

Arrancó el partido con ambos equipos dando pocas oportunidades al rival (15-15). Las locales intentaban dejar atrás a las tinerfeñas con Itziar López como principal atacante, obligando a Juan Diego García solicitar el primer tiempo muerto. Lo intentaron hasta el final, con Jessica Wagner liderando las ofensivas insulares, pero terminaron cediendo en el primer set (27-25).

El golpe pareció consumir al Sanaya Libby’s, aunque el inicio del segundo reflejó un esperanzador 0-4. Sin embargo, la buena defensa de las catalanas y varios errores no forzados en el equipo insular, quebraron la resistencia de un equipo cabizbajo, impotente, como resignado a su inferioridad en la cancha. El servicio de Aina Barber puso el resto (25-23).

El arranque del tercero fue igualado, con Patricia Suárez liderando al equipo tinerfeño en ataque (5-4). Pero el balance bloqueo/defensa, un absoluto desastre ayer, hundió al Sanaya Libby’s. Ni Jordan ni Wagner parecen tener piernas para dificultar el ataque del rival. Y así es imposible.

El Sant Cugat se paseó durante la manga y apretó el acelerador al final para firmar un encuentro redondo (25-17). Saque agresivo, dirección adecuada, trabajo en la red, buenas defensas y aprovechamiento de los recursos ofensivos. Todo lo que no es el Haris ahora.