Una bochornosa segunda mitad, en la que apenas mostró ideas en ataque y exhibió una enorme indolencia en defensa, han provocado la primera derrota del Iberostar Tenerife en la Basketball Champions League 20/21, concretamente en la visita aurinegra al Dinamo Sassari (92-72).

Los laguneros firmaron un encuentro más que notable hasta el descanso, con una renta que llegó a ser de 13 puntos a poco del intermedio (34-47), ventaja en la que Fitipaldo (20 puntos en dos cuartos y 24 al final) tuvo mucho que ver. Sin embargo, todo cambió tras el intermedio ya que los aurinegros dejaron meterse a su rival en el choque recibiendo un parcial de 23-2 (57-49).

Cuando se quiso dar cuenta, aunque solo de manera tímida, el cuadro lagunero estaba siendo vapuleado por un rival con mucha más garra y acierto. El Iberostar se sumió en un mar de pérdidas (20 en total) a la vez que siguió sin ver aro. La impotencia en el bando canarista aumentó ante una actuación arbitral a la altura de la calidad del juego del cuadro preparado por Txus Vidorreta, por momentos ausente en la dirección. Shermadini, casi inédito dentro, y Huertas, descalificado por dos técnicas, dieron buena fe de ello. La renta local alcanzó los 25 (84-59) antes de un diminuto maquillaje final de los tinerfeños.