Menos de una semana después de la suspensión del Deportivo-Fuenlabrada por un brote de coronavirus, no se atisba una fácil salida a un enredo que tuvo ayer nuevos capítulos en los que el presidente de LaLiga, Javier Tebas, fue uno de los principales protagonistas tras declarase "único responsable" del viaje del conjunto madrileño a Galicia. Con la expedición del Fuenla confinada en un hotel a la espera de una solución, LaLiga, el Fuenla, el propio Tebas, los jugadores el Deportivo y la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) sellaron una tarde intensa con intercambio de diferentes comunicados que presagian un final del conflicto poco cercano.

El primero en hacer acto de presencia fue el Fuenlabrada. Por la mañana declaró no sentirse responsable del brote de covid-19. Más bien, afirmó ser una víctima y dejó claro que había seguido los protocolos y las instrucciones de LaLiga previos al duelo ante el Deportivo. Sin embargo, en dos párrafos del comunicado llegó la confusión de la pequeña tormenta que vendría después. El Fuenla dijo ponerse en manos de las instituciones deportivas para buscar la mejor solución para los afectados y la competición, y trasladó la disposición de los jugadores y del cuerpo técnico de recuperarse para disputar el encuentro si así se estimase. "En caso de que las instituciones deportivas autorizadas no consideren viable, en tiempo y forma, la disputa del partido, el CF Fuenlabrada acatará la decisión que tomen las mismas", añadió.

LaLiga reaccionó y se agarró a esas últimas palabras del club madrileño para lanzar un comunicado titulado "Agradecimiento de LaLiga al CF Fuenlabrada". En lo que parecía una confusión, alababa la "generosidad deportiva" demostrada por la entidad de Jonathan Praena con su disposición a acogerse "al principio pro-competitione" y "acatar la decisión elegida por LaLiga entre las dos soluciones propuestas por el club: esperar para disputar el encuentro a la recuperación de los jugadores o suspender el partido definitivamente". La solución que tomaba LaLiga no era otra que comunicar a la Federación Española (RFEF) su decisión de suspender definitivamente el partido y que el Elche dispute el playoff.

Casi de forma paralela, Javier Tebas emitía un mensajeen Twitter declarándose "responsable" del viaje a La Coruña de la expedición del Fuenlabrada que llevó a la ciudad gallega el coronavirus. "Seguisteis todas las instrucciones que os dio LaLiga, soy yo quién tomó esa decisión. Nadie más. El fútbol os debe una", escribió.

La reacción del Fuenlabrada no se hizo esperar, aclaró que no había renunciado en ningún momento a jugar el partido ante el Deportivo, y dejó claro que la decisión también está en manos de la RFEF y del Consejo Superior de Deportes. Para liar más el asunto, LaLiga, a su vez, quiso aclarar la aclaración y afirmó que el Fuenlabrada trasladó a la institución presidida por Tebas una propuesta con las dos citadas alternativas. Su decisión, dijo, fue la segunda.

Los jugadores del Fuenla, atónitos al intercambio de mensajes lanzaron el quinto comunicado. Exigían disputar el partido, se reservaron el derecho a emprender acciones legales y apelaron a la responsabilidad de su club para defender sus intereses. El Deportivo tampoco guardó silencio y declaró sufrir "un atropello" a la vez que mostró su "sorpresa, malestar y estupefacción" por la sucesión de mensajes entre el Fuenlabrada y LaLiga. También manifestó su intención de anunciar hoy las medidas que iban a adoptar y su postura oficial. Para culminar, la (AFE) mostró su respaldo a cualquier decisión que adopten sus representados con el objetivo de defender sus derechos "hasta el final". El enredo se mantiene y no se vislumbra una solución. El lío sigue sobre la mesa.