A la segunda Txus Vidorreta se puede salir con la suya y repatriar a Aaron Doornekamp para su Iberostar Tenerife. Ya lo tuvo a sus órdenes en su anterior etapa en el conjunto canarista, se lo llevó a Valencia en su curso como técnico taronja, y ahora puede volver a reencontrarse con él. Tras su intento infructuoso del pasado verano -en el que acabó renovando en el equipo levantino-, el CB Canarias ha vuelto a la carga para recuperar al canadiense con pasaporte holandés (34 años y 2,01 metros), un jugador que por sus virtudes baloncestísticas viene como anillo al dedo para el estilo de juego del preparador bilbaíno.
El interés del CB Canarias por Doornekamp lo adelantó ayer el portal Home of Glory, dentro de una puja en la que también parece haber entrado el Joventut de Badalona. Sin embargo, el hecho de regresar a un equipo que ya conoce -debutó en España en él durante el curso 16/17, siendo uno de los artífices de la consecución de la Basketball Champions League- y, sobre todo, reencontrarse con un entrenador, Vidorreta, que ha sabido sacar de él su mejor versión, pueden resultar determinantes en la decisión final del jugador nacido en Richmond.
A esta rivalidad que el CB Canarias podría encontrar en la Penya -que ya pujó hace meses infructuosamente por el fichaje de Huertas-, la entidad isleña deberá esperar a que el Valencia Basket no insista -a modo de ejercer el derecho de tanteo- en la continuidad de Aaron, algo que ya sucediera hace un año puesto que su técnico Jaume Ponsarnau abortó su marcha. En este curso Doornekamp promedia en la ACB 5,4 puntos (con un 42,4% en acierto en triples), 2,1 rebotes y 1 asistencias para 5,1 de valoración en poco más de 16 minutos y medio por duelo. Ha sido titular en 13 de los 22 encuentros ligueros. En Euroliga sus números son casi calcados: 4,9 puntos (40,9% en triples), 2,3 rebotes, 0,9 asistencias y 4,9 de valoración en 16:11 por duelo, siendo titular en 13 de los 28 choques celebrados.
Versatilidad al tres y al cuatro
En caso de fraguarse el regreso de Aaron Doornekamp, el Iberostar Tenerife recuperaría a un jugador muy versátil, capaz de jugar como cuatro abierto e incluso como alero. A esta dualidad, Aaron añade su contrastada experiencia, y el ser extremadamente sobrio, pero a la vez muy trabajador, intenso en defensa, inteligente en el juego sin balón, insistente en el rebote y letal desde las esquinas, cualidad esta última que vale su peso en oro en los sistemas de Txus Vidorreta.
