Amid Achi es uno de los tres máximos accionistas del CD Tenerife, junto a Miguel Concepción y Juan Pelayo. Asistió junto a ellos a la subasta en la que el empresario peninsular José Miguel Garrido adquirió 5.000 acciones y se hizo con el 3 por ciento de la SAD. Pero ni le asusta la entrada en el accionariado del expresidente del Albacete ni se muestra receptivo a una colaboración con él, "salvo que venga a ayudar".

En declaraciones a Radio Marca, el empresario de origen sirio se refirió a Garrido como "un señor que parece que invierte en los clubes de fútbol y que sabe sacar dinero". Más adelante, profundizó en su definición: "Es un especulador. Esto es lo que tengo entendido. Compra, vende, tiene acciones en varios clubes".

A Achi no le ha sentado bien el primer paso que ha dado el expresidente del Albacete. Por eso, lanzó una seria advertencia: "Entrar en el Tenerife por la puerta trasera no es recomendable". Lo hizo antes de señalar a Miguel Concepción como el interlocutor al que tendría que dirigirse. "No le conozco de nada ni tiene que hablar conmigo porque no soy el presidente. Él sabrá lo que hace, cómo lo hace y quién se lo hace", expuso en una velada alusión a Corviniano Clavijo.

Cuestionado por lo que sucederá en las próximas semanas, comentó que "este señor viene de la mano de una persona de aquí. Seguirá la misma línea. Si compra acciones ahora seguirá comprando", descartando que existan grandes paquetes que pueda controlar en un plazo corto de tiempo. "Si Garrido tiene mucho dinero y quiere pagar las acciones a precios altos a pequeños accionistas puede que sí", contestó sobre la posibilidad de que el nuevo inversor alcance el 1o por ciento del capital social.

En este sentido, descartó cualquier novedad en el consejo de administración porque "los empresarios principales" son Miguel Concepción, Juan Pelayo y él mismo. "Mientras estemos de acuerdo los tres, ni Garrido ni nadie puede acercarse al Tenerife. La suma de acciones dice lo que dice. Puede reunir un 5, un 8 o un 10. ¿Pero qué es eso comparado con todos nosotros? Y ya le digo que mejor ponernos de acuerdo antes de que venga alguien de fuera", zanjó.

No obstante, Achi se abrió a la posibilidad de que "venga a ayudar". En ese caso, "será bienvenido, pero si lo que quiere es especular vamos a tratar de que no lo logre". Además, descartó tomar la iniciativa en los contactos porque "si tiene el 3 por ciento, ¿a qué acuerdo vamos a llegar por él? ¿Él ama el Tenerife? ¿Ha estado cerca del club? Si viene a meter dinero para poder ganar el doble o el triple el día de mañana no va a contar conmigo. Si viene a aportar jugadores, adelante".

La mano derecha de Concepción ve al presidente "más fuerte que todos nosotros" y ratifica la unidad de acción con Pelayo: "Fuimos los tres y la idea era comprarlo a partes iguales. No queríamos ir uno contra el otro. No se trata de personas, sino ayudar al Tenerife".

Son conocidas las valoraciones futbolísticas de Amid Achi, que cargó con dureza en épocas anteriores contra entrenadores como José Luis Martí. Ayer tampoco se cortó a la hora de referirse a Aritz López Garai. "Creo que se planteó mal el partido. Hubo mucho cambio. Alberto estaba bien por delante de la defensa y lo puso de central, esos cambios así?", empezó diciendo antes de deslizar que notó cierto exceso de confianza. "Ese humo que se sube a la cabeza... Creen que van a ganar seguro. Estaban jugando un poco así y no teniendo al contrario en consideración. Pensaban no se preocupen que va a llegar el gol y vamos a ganar? y mira", explicó el accionista de referencia de la entidad blanquiazul. Pero sus palabras más duras fueron para el técnico, que había culpado a Alberto Jiménez de la derrota por el error que cometió en el 0-1. "Será el error del entrenador, que lo ha puesto donde no lo tiene que poner. Si sabe que no está apto para este puesto y se lo ha dicho todo Dios? pero este tío (en alusión a López Garai) parece que le gusta llevarle la contraria a todo el mundo", indicó sin contemplaciones.

Achi "todavía no ha visto nada" al preparador vasco. "Vamos a esperar a ver lo que hace. Lo veo caprichoso, como casi todos los entrenadores. Quieren demostrar más que nadie y, para ellos, si todo el mundo dice una cosa, hacen la otra", completó en su primer diagnóstico.

En cuanto a los fichajes, consideró a Aitor Sanz "el mejor fichaje porque tiene mucha humanidad, humildad y lo da todo. Es una persona correcta, honesta, entregada". En cuanto a las novedades del verano, pidió tiempo porque aún son "promesas e ilusiones". En este punto, aseguró que se conforma "con no sufrir. Si el Tenerife queda entre el puesto 14 y 18 firmaría ahora mismo, para no sufrir".

"El error no es de Alberto, sino del entrenador"