Sólido en la red, solidario en los esfuerzos. Así podría definirse al Tenerife Libby’s La Laguna que compareció en el pabellón Miguel Solaesa de Gran Canaria. Las blanquiazules supieron cómo desactivar la defensa del recién ascendido Heidelberg para sumar tres puntos en el estreno de la Liga Iberdrola 22/23. Hasta cuatro jugadoras del cuadro de Juan Diego García alcanzaron los 15 puntos.

Empezó fuerte el Tenerife Libby’s La Laguna. Con la confianza que ganó en la Supercopa. Después de tapar los ataques a una pierna de las centrales locales, comenzó a sentirse cómodo sobre la pista. Julie Lengweiler es una socia perfecta para Patricia Aranda. Así se originó un hueco en el bloqueo colegial; Santiago Guerra pidió tiempo muerto antes de que fuera demasiado tarde (10-13).

Paulatinamente fueron entrando las centrales en juego. Niece y Meg Wolowicz desestabilizaron a la defensa, que se limitaba a tapar las acometidas laguneras. El Heidelberg no se rindió, apuró sus opciones. Pero sendos blockouts le dejaron fuera de combate (24-26).

El segundo set fue mucho más plácido para las leonas. Juan Diego García detectó cierto nerviosismo en la dirección de juego, y eso lo aprovecharon sus jugadoras, quienes interpretaron a la perfección los ataques del contendiente. Lengweiler volvió a aparecer por cuatro, incluso cuando Holzmaisters y Jacobsen se hicieron grandes (5-10). Un parcial de 0-6 le dio alas a las tinerfeñas, que acabaron por imponerse a base de juego coral y con la defensa de Llabrés. También con la aportación de Belly y Daysa Delgado, que entraron en la rotación blanquiazul. Precisamente, fue la center tinerfeña la que cerró el segundo tiempo.

La actitud del rival, intachable. Y es que a pesar de marchar 9-17 por detrás, supo resurgir tras una concatenación de errores. Un parcial de 6-1, con Sánchez al servicio –hizo dos puntos directos–, llevó a Juan Diego García a pedir un tiempo muerto. El Tenerife Libby’s logró desperezarse, pero volvió a topar con una gran Jacobsen, que llevó el tercer set a un 27-25.

Tocaba redimirse resolviendo los problemas en la recepción. Y así fue. Las leonas salieron agresivas desde el saque, donde Wolowicz dio cuenta de un servicio que varía su trayectoria a lo largo de la pista. La central y Arredondo, imperial en el balance ataque-defensa, guiaron al Tenerife Libby’s hasta el 12-19. El Heidelberg dio la cara, pero la actuación del vigente campeón fue notable.