El Luguama Guamasa se alzó ayer, por fin, con el entorchado de la Liga CaixaBank de Primera Categoría de Tenerife. Ese título que se le resistió en un par de ocasiones antes de que la pandemia detuviera toda actividad luchística durante más de año y medio. Anoche, de vuelta a la normalidad, y en un abarrotado terrero Mencey Tegueste –con la presencia de más de 2.200 espectadores–, el conjunto adiestrado por Juan Luis Santana se impuso con holgura al Tegueste (12-9). Lo hizo en una especie de venganza, toda vez que doblegó al conjunto que lo había separado, en el momento de la verdad, de los máximos entorchados isleños. Ayoze Reyes resultó fundamental toda vez que el puntal A del Guamasa fue el encargado de sentenciar el duelo al dar en tierra con Mamadou Camara, principal exponente del cuadro teguestero, anoche en la condición de visitante ante la vitola de campeón de la fase regular esgrimida por su oponente.

La luchada por el título discurrió pareja durante bastantes sillas, con sendos empates hasta el 7-7. Un tramo en el que destacó la labor de Francisco Vega, autor de hasta tres puntos para el Guamasa. Superado ya el ecuador de la contienda Aday Barbuzano puso el 8-7 en el electrónico tras tumbar en la tercera, y tras empate a luchas, a Argeo Galván. A continuación Jairo de la Paz y Rubén Galván, tras darse una cada uno, acabaron separándose para el 9-8. Llegado el momento de la verdad salió a la arena Ayoze Reyes, que quitó a Hakim García dándole las dos seguidas (10-8).

Ya en una situación límite, el Tegueste tiró de su puntal A, un Mamadou Camara ayer mermado físicamente por unas molestias, una limitación que no fue óbice para que le diera las dos seguidas a Aday Barbuzano (10-9). Pero la recuperación de los anoche visitantes quedó en nada toda vez que Jonay Reyes dejó al Guamasa a un paso del título tras deshacerse de Miguel Rodríguez (11-9). Fue justo antes de la brega más esperada. En el duelo cumbre, Ayoze Reyes y Mamadou Camara se separaron en la primera agarrada, si bien el puntal de los laguneros acumulaba ya por entonces dos amonestaciones frente a solo una de su rival. A Ayoze no le quedó otra que ir a por su adversario en la segunda, y en un desliz del líder del Tegueste, ejecutó una maña entre una patada y un vacío que dio con el maliense en la arena en lo que significó el 12-9 definitivo. El juvenil Francisco Javier Pérez fue el otro luchador del Guamasa que quedó en pie.

La victoria de Ayoze fue la culminación a una gran noche de lucha canaria que al margen de lo deportivo también tuvo sus ingredientes previos de emotividad en un terrero que presentó una afluencia de gala. Así, ambos conjuntos salieron a la arena acompañados de varios niños y portando sendas banderas de Tenerife, Canarias y Ucrania. Precisamente en los prolegómenos sonó el himno del citado país como muestra de respaldo a los momentos delicados por los que está pasando esta nación. Además, el barítono Augusto Brito interpretó, a capella, el himno de Canarias.