Bienal de Venecia 2023: un incompleto laboratorio del futuro

La arquitecta y escritora ghanesa-escocesa Lesley Lokko es la comisaria de la 18ª edición

Un momento de de la inauguración de la Bienal en los Giardini di Venezia

Un momento de de la inauguración de la Bienal en los Giardini di Venezia / dulce xerach pérez

La Bienal de arquitectura de Venecia 2023 abrió sus puertas el jueves pasado para invitados y periodistas y estará abierta al público desde hoy hasta el próximo 26 de noviembre. Esta 18ª edición está comisariada por una mujer muy singular, la arquitecta, profesora de arquitectura y escritora ghanesa-escocesa Lesley Lokko, que además es una escritora bestseller de novela romántica, autora de La última debutante, entre otros títulos. En 2020, Lesley Lokko fundó el African Futures Institute en Accra, Ghana, una escuela de posgrado en Arquitectura y una plataforma para eventos públicos. En 2015 fundó la Graduate School of Architecture en Johannesburgo. Ha enseñado en Estados Unidos, Europa, Australia y África. Creo que su nombramiento como comisaria de la bienal de Venecia tiene que ver con todo esto, con su contribución a la enseñanza de la Arquitectura, especialmente en África.

África impulsora del mundo del futuro

En la Bienal destaca la presencia de arquitectos africanos, eso es lo primero reseñable El certamen muestra al continente africano como impulsor potente y joven en la configuración del mundo venidero y desarrolla diferentes nociones, para nada convencionales, de lo que podría traer un mejor futuro.

Durante los paseos de estos días entre el Arsenale y el Giardini, sin embargo, no se palpa optimismo ni pesimismo, solo la sensación de cambio, de que estamos a punto de entrar en un mundo nuevo. Esa es la impresión compartida por muchos amigos que están en Venecia en estos momentos, llenos de corazonadas pero incapaces de saber si este cambio será para bien o no.

Son 63 pabellones nacionales los que participan este año, además de nueve eventos paralelos en toda la ciudad, como son los pabellones outsiders de Escocia y Cataluña. El Laboratorio del Futuro es una exposición dividida en seis partes. Están presentes 89 participantes, más de la mitad de los cuales son de África o de la diáspora africana. El equilibrio de género es parejo y la edad media de los participantes es de 43 años, mientras que desciende a 37 en los Proyectos Especiales de la Comisaria (el pabellón de Italia en los Giardini y gran parte de las naves centrales del Arsenale), en los que el más joven tiene 24 años.

Bienal de Venecia 2023: un incompleto laboratorio del futuro

Bienal de Venecia 2023: un incompleto laboratorio del futuro / dulce xerach pérez

El 46% de los participantes considera la formación como una actividad profesional real y, por primera vez, casi la mitad de los participantes son de pequeños estudios de entre una y cinco personas. En todas las secciones de El Laboratorio del Futuro, más del 70% de las obras expuestas han sido diseñadas por estudios dirigidos por un equipo muy reducido.

Estas estadísticas pretenden reflejar un cambio sísmico en la cultura de la producción arquitectónica en general y un cambio aún mayor en la participación en exposiciones internacionales, aunque yo no me lo creo.

Lesley Lokko se basa en que el equilibrio cambia. Las estructuras se desmoronan. El centro (Europa, la Europa hipócrita que denuncian los senegaleses protagonistas del pabellón de Cataluña) ya no aguanta.

Sin embargo sí que estoy de acuerdo en otra idea de Lokko: en el corazón de cada proyecto está la herramienta principal y decisiva, que es, y solo puede ser, la imaginación (basada en el conocimiento profundo porque si no difícilmente da frutos duraderos).

Bienal de Venecia 2023: un incompleto laboratorio del futuro

Bienal de Venecia 2023: un incompleto laboratorio del futuro / dulce xerach pérez

Descolonización y descarbonización

Según Lokko es imposible construir un mundo mejor sin antes imaginarlo. El Laboratorio del Futuro comienza en el Pabellón Central de los Giardini, donde se han reunido 16 estudios que representan una destilación de fuerza mayor de la producción arquitectónica africana y su diáspora. Luego se traslada al complejo del Arsenale, con la sección Las amistades peligrosas. En ambos espacios hay obras de jóvenes practicantes africanos, cuyo trabajo confronta directamente los dos temas de la Exposición, la descolonización y la descarbonización, brindando una instantánea, un atisbo de prácticas futuras y formas de ver y estar en el mundo.

Pero al final, en mi humilde opinión, ni siquiera Lesley Lokko, africana, representante de la negritud y lo femenino en la arquitectura, tampoco logra entender a África en su conjunto, que es mucho más, que es más híbrida y no solo está formada por un continente sino por diversos archipiélagos, muchas islas, que la comisaria ignora. No es una queja, es solo la descripción de una realidad.

dulce xerach pérez abogada, doctora en arquitectura. investigadora de la universidad europea