La momia de Herques. | El Día

Madrugada del 5 de junio de 2016: a la sala de urgencias del Hospital Quirónsalud de Madrid llegan 4 momias, un equipo de expertos del Museo Arqueológico Nacional, además de 7 técnicos especialistas en la manipulación y traslado de momias, junto al equipo técnico y humano de la productora Story Producciones. Allí los espera un grupo de doctores especialistas en radiología del centro hospitalario. Las momias, tres egipcias y una guanche, pertenecientes a la colección del Museo Arqueológico Nacional (MAN), se convierten en pacientes privilegiados y, ante el asombro de los presentes en las urgencias, son capaces hasta de sortear la lista de espera. Así, tras abandonar sus vitrinas en el museo, eran analizadas concienzudamente mediante un equipo de tomografía computerizada de nueva generación, una técnica que permitió escanearlas y generar su representación volumétrica y tridimensional con más de 2.000 imágenes transversales.

Todo ese ingente y novedoso material científico ha servido de base para un ambicioso proyecto documental denominado La historia secreta de las momias, que combina el desarrollo de investigaciones científicas con recreaciones históricas. La primera entrega, La momia dorada, ya cosechó en 2019 varios premios en festivales como el de Cannes, Hamburgo y Nueva York, donde fue reconocido como mejor documental histórico del año. Ahora le llega el turno al trabajo titulado Las momias guanches, una de las pocas producciones que se ha salvado de la pandemia y que se emite hoy, miércoles, a partir de las 21:00 horas en La2 de TVE.

En palabras de su director, Regis Francisco López, durante el rodaje de La momia dorada el equipo cayó en la cuenta de que “había un personaje secundario muy interesante y desconocido en España”, la momia guanche del barranco de Herques, objeto de un estudio multidisciplinar con pruebas de ADN, estudios radiológicos de última tecnología, análisis de carbono-14 , datación en acelerador de partículas, reconstrucciones fo-renses o exámenes ultravioleta.

La que está considerada como la momia mejor conservada del mundo se convierte así en el hilo conductor de una historia que recrea el modo de vida de los antiguos pobladores de Tenerife y pone el acento en un sobresaliente aspecto cultural: la técnica de las momificaciones, que destaca por su perfecta conservación de elementos, como la dentadura, y que se diferencia de la técnica practicada en el antiguo Egipto por su conservación de las vísceras y en una preservación intacta de la musculatura.

El documental, además, recoge los hallazgos que la Universidad de La Laguna lleva años estudiando sobre el barranco de Herques y la mítica Cueva de las Mil Momias que el aristócrata Luis Román halló allá por el siglo XVII.

Sus autores explican que en Las momias guanches no se determina, ni es esa su pretensión, la causa exacta de la muerte de ese varón embalsamado, pero sí que se le consigue poner rostro, por primera vez después de un milenio, gracias al trabajo del escultor forense Juan Villa Herrero.

En el documental han participado algunos de los médicos, científicos e historiadores más prestigiosos de España, como la jefa del Departamento de Conservación del Museo Arqueológico Nacional, Teresa Gómez Espinosa; la genetista Rosa Fregel; los médicos Vicente Martínez de Vega y Javier Carrascoso; y el director del Museo de Naturaleza y Arqueología de Tenerife, Conrado Rodríguez-Maffiotte. También ha contado con la participación del jefe de Unidad FOTOAIR en el CIEMAT, Benigno Sánchez; la conservadora del Museo Canario, Teresa Delgado; el catedrático de Arqueología de la Universidad de la Laguna, Antonio Tejera Gaspar; los historiadores Alfredo Mederos y Milagros Álvarez Sosa, y el doctor Manuel Maynar.

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Presentación del documental de las momias guanches Delia Padrón

Algunos detalles de un ancestro

Origen: El barranco de Herques

Esta momia procede de una cueva del Barranco de Herques, en la costa suroriental de Tenerife, entre los municipios de Güímar y de Fasnia. Sin embargo, se ha perdido en la memoria la localización de aquel yacimiento, denominado posteriormente por algunos como Cueva de las Mil Momias.

La piel: Cuarteada y amarillenta

La piel se encuentra cuarteada. Las venas y las arterias se manifiestan a través del destacado relieve que forman. En la tonalidad de la piel predominan el amarillento y el pardo, aunque en algunas zonas adquiere un matiz rojizo o se oscurece. Posiblemente, los ungüentos aplicados dejasen restos tanto en la piel como en el interior. Le falta el fardo de pieles que la cubría y el paso del tiempo ha dejado su pátina sobre el cadáver desprotegido.

Cabeza: Inclinada sobre el hombro

La cabeza está inclinada sobre el hombro derecho. El cráneo muestra rasgos característicos masculinos: prominencias supraciliar y occipital, cuadratura de la morfología orbitaria y ángulo mandibular cercano a los 90º, con inserciones musculares potentes. Cabe destacar la boca grande en la que pueden apreciarse los dientes a través de la estrecha apertura de los labios, dientes aparentemente bien conservados.

Las piernas: Estiradas en paralelo

Las piernas se disponen estiradas en paralelo, una ligeramente más alta. Los pies, yuxtapuestos y extendidos, se conservan casi intactos, salvo por unas pequeñas lagunas en la piel de la planta causadas por ataque de insectos, la mayoría concentradas en los dedos. Se ha conservado una fina tira de cuero, o de tendón, uniendo los dedos pulgares.

Dentadura: En perfecto estado

El excelente estado de la dentadura indica que estuvo bien alimentado, que su dieta fue baja en azúcar y que debió mantener ciertas condiciones de higiene.

Sexo y edad: Hombre entre 35 y 40 años

La determinación de la edad se ha realizado a través del cierre de las suturas, de la dentición y de la pelvis. La superficie de esta última tiene una textura granular fina, patrón regular y ondulaciones en la superficie transversa, propio de un individuo adulto joven. No obstante, en la columna lumbar se identifican incipientes cambios artrósicos. Con los datos radiológicos obtenidos se puede deducir que la momia tendría una edad aproximada de 35-40 años al fallecer.

Entorno cultural: Estrato social alto

El hecho de que fuese momificado nos indica que debió pertenecer a un estrato social alto. No todos los cadáveres se momificarían y solo tenían acceso a esta práctica las consideradas las clases altas. Además, las largas manos, sus uñas bien cuidadas y correctamente cortadas son otra evidencia a favor de que el difunto perteneció a la clase alta. Lo mismo ocurre con sus pies.

Deposición del cadáver: Cuevas necrópolis

En la isla de Tenerife, una vez enfardados los xaxos se trasladaban a cuevas situadas en barrancos, acantilados o laderas, lugares de difícil acceso. Las cuevas necrópolis suelen tener amplia capacidad para albergar estos enterramientos colectivos.

Embalsamamiento: La técnica del mirlado

Se ha demostrado que el mirlado se realizó sin eviscerarlo ni extraer su cerebro, lo que coincide con los resultados de los estudios bioantropológicos realizados en otros especímenes y contradice las noticias de los cronistas y los viajeros que se refieren a la evisceración en el proceso de momificación. La contradicción puede deberse a la contaminación que hubo al extrapolar importantes aspectos de los procesos de momificación egipcios al proceso de mirlado de los guanches o bien a que coexistieron diferentes tipos de embalsamiento en la cultura guanche. 

Conservación: Ambiente seco

Aunque se considera el espécimen mejor conservado de su especie, las circunstancias a las que se ha visto sometido a partir de su hallazgo han dejado huella. Sin embargo, son relativamente escasas teniendo en cuenta los cambios de ubicación y de condiciones ambientales a los que ha estado expuesto y lo vulnerables que son las momias. Desde que llegó a Madrid se ha trasladado a diferentes instituciones museísticas y ha terminado aclimatándose a unas condiciones bastante más secas que las de su lugar de origen, lo que ha incidido positivamente en su conservación.