El problema de la superpoblación en Canarias es «real». Así lo admitió ayer el presidente del Gobierno regional, Ángel Víctor Torres, en el pleno del Parlamento de Canarias después de anunciar que la Comisión que se encargará de estudiar el reto demográfico del Archipiélago se constituirá esta misma semana. En las Islas han pasado de residir algo más de 300.000 personas a principios del siglo XX a más de 2,2 millones en la actualidad. Algo que hace necesario llevar el debate hasta la Cámara regional a través de esta comisión en la que se tratará de llegar a un consenso entre los diferentes grupos políticos.
Sin embargo, Torres también advirtió que aunque el aumento de población es evidente si se analiza de manera global, las ocho islas van a diferentes velocidades. No es igual lo que ocurre en las más pobladas y en las menos, lo que pasa en el interior o en la costa y la atracción poblacional que ejercen las capitales. «Tampoco es igual lo que ocurre en las islas verdes en cuanto a su desarrollo demográfico, que lo que ocurre en otras islas donde hay una atracción turística vinculada a la playa en las que ha aumentado la población», recalcó el presidente.
Torres detalló que mientras en los últimos 25 años, Lanzarote y Fuerteventura han duplicado su población, el crecimiento del número de residentes en La Palma ha sido del 2%, 81.000 habitantes en 1996 frente a los 83.000 actuales. «También en Canarias tenemos un fenómeno de islas vaciadas» o que caminan a una velocidad distinta que la de otras, puntualizó.
El Archipiélago ha pasado de tener 300.000 habitantes a principios del siglo XX a 2,2 millones
Para analizar esta situación todos los grupos con representación en el Parlamento regional han respaldado la creación de una comisión de estudio para abordar este tema y su constitución está prevista que se apruebe en este mismo pleno.
En opinión de Torres, uno de los aspectos decisivos que deberá tratar es establecer si este aumento de la población en Canarias conlleva una pérdida de Producto Interior Bruto (PIB), algo que consideró «discutible», ya que recordó que en la década de los 80 del siglo pasado el incremento del PIB y de la población iban a la par. Aunque reconoció que en los últimos veinte años sí se ha producido una importante caída. «Hemos perdido enteros frente a otras comunidades», admitió. De hecho para encontrar un momento en el que la riqueza media de los canarios hubiera estado por debajo de la que se registró el año pasado había que remontarse a 1962, en pleno franquismo.
En este sentido, Torres señaló que «lo importante» es hablar de productividad y que unas retribuciones justas en Canarias repartan una mayor riqueza en la comunidad.
Esta no es la primera vez que el debate sobre la superpoblación del Archipiélago sale a la esfera pública. A principios de siglo, el entonces presidente del Gobierno, Román Rodríguez, convocó a un comité de expertos sobre este asunto. Tras esto, el expresidente Paulino Rivero también sacó varias veces a colación la necesidad de poner límites a que población foránea se estableciera en las Islas.
Todos los grupos con representación en el pleno respaldan la creación de esta nueva comisión
Ahora, han sido Nueva Canarias (NC) y la Agrupación Socialista Gomera (ASG) los que han vuelto a poner el tema encima de la mesa, pero a diferencia de lo que ha ocurrido en el pasado, esta vez ha sido abrazado por el resto de los grupos políticos. Fue precisamente el portavoz de ASG, Casimiro Curbelo, quien cuestionó ayer en el pleno al presidente Torres sobre este asunto. «Seríamos hipocritas si no pensamos que hay déficit que tenemos que tomar en consideración para orientar el futuro de nuestra tierra como son la pobreza y la exclusión social», le indicó.
