La nueva pena de muerte que se aprueba en Estados Unidos: "Podría ser extremadamente doloroso"

Un preso que está en el corredor de la muerte desde 1988 será ejecutado en una prisión de Alabama utilizando un gas hasta ahora nunca utilizado y que ha suscitado las críticas de diversas asociaciones internacionales

Estados Unidos probará este novedoso sistema de ejecución utilizando gas nitrógeno

Estados Unidos probará este novedoso sistema de ejecución utilizando gas nitrógeno / Pixabay

Aunque parezca una locura, en algunos lugares del mundo aún se sigue aplicando la pena de muerte para los presos condenados por delitos muy graves. Los métodos que se utilizan para la pena capital son muy diversos, desde la silla eléctrica hasta una inyección letal. Ahora, en una prisión de Alabama (Estados Unidos) se probará un sistema que ya ha causado las críticas de diversas asociaciones en defensa de los derechos humanos.

Kenneth Eugene Smith será el primer reo condenado a muerte por la inhalación de gas nitrógeno puro del mundo. Smith es un preso bastante peligroso, por eso el juez ha considerado que se tendrá que enfrentar a la pena más dura que se puede tener, la muerte. Fue condenado cuanto tenía 22 años tras estar acusado de participar en el asesinato de Elizabeth Sennett en el año 1988. Según la sentencia, la operación se hizo por encargo del marido de la víctima, Charles Sennett, que pretendía cobrar una indemnización. Una semana después del asesinato, Sennett se suicidó al intuir que las autoridades estatales le consideraban como uno de los sospechosos del fallecimiento de su mujer. Todos estos acontecimientos tuvieron lugar en un pueblo de dicho estado, por tanto, las leyes locales contemplan que ante estos casos se puede aplicar dicha condena.

Otro de los partícipes en el crimen ya fue ejecutado en el año 2010 mediante una inyección intravenosa. El estado de Alabama intentó en 2022 aplicar el mismo método a Smith, aunque el responsable de aplicarle la inyección no fue capaz de encontrarle la vía intravenosa. Según los abogados de Smith, esto le dejó numerosas incisiones y cesaron en el intento cuando el reloj marcaba la medianoche y la orden de ejecución del estado expiraba.

Así será la ejecución por gas nitrógeno

El controvertido método ya fue aprobado en 2018 por los estados de Misisipi y Oklahoma, pero hasta ahora no se había puesto en marcha. Denominada oficialmente como hipoxia de nitrógeno, consiste en seguir un procedimiento similar a la anestesia que se utiliza antes de las operaciones. El preso entrará en la 'cámara de la muerte' y se acostará en una camilla atado completamente; seguidamente, los funcionarios de la presión le colocarán una mascarilla y abrirán la bombona de este gas. El nitrógeno hará el resto privándole del oxígeno necesario para vivir y causándole la muerte en solo unos minutos.

El cofundador de la Coalición Mundial contra la Pena de Muerte y miembro de la Comunidad SantEgidio, Mario Marazziti, durante una rueda de prensa para denunciar el método con el que será ejecutado el preso Kenneth Smith.

El cofundador de la Coalición Mundial contra la Pena de Muerte y miembro de la Comunidad SantEgidio, Mario Marazziti, durante una rueda de prensa para denunciar el método con el que será ejecutado el preso Kenneth Smith. / EFE

Aunque parezca sencillo, no lo es. Este modelo no se ha puesto en práctica y no se sabe las consecuencias que tendrá si no sale bien. La capacidad pulmonar de los reos determinará la efectividad en cuanto al tiempo de duración de la delicada operación. En una entrevista concedida a la BBC, Smith ha mostrado su desesperación por pasar tanto tiempo en el corredor de la muerte. "Mi cuerpo se está desintegrando, no dejo de perder peso. Tengo náuseas todo el tiempo. Me dan ataques de pánico con regularidad... Esto es solo una pequeña parte de lo que he estado lidiando a diario. Tortura... básicamente”, le dijo el preso al intermediario entre él y la cadena estadounidense."

Las asociaciones internacionales critican el método

La Alta Comisionada para los Derechos Humanos en la ONU, Ravina Shamdasan, ha señalado que se está ante una posible violación de "la prohibición de la tortura u otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes, así como su derecho a remedios efectivos". Amnistía Internacional también ha emitido un comunicado en el que destaca que la ejecución podría ser "extremadamente peligrosa". Según la organización, este método "viola los tratados internacionales de derechos humanos que Estados Unidos ha ratificado".