«En la cabeza de… Blagota Sekulic», artículo de Dani Barranquero en acb.com

Como si puedes entrar en la cabeza de Sekulic y viajar a través de su carrera, de sus recuerdos, de sus momentos. Descubre cómo es la estrella del CB Canarias. ¿Sabías que en su día jugó de escolta? ¿Que a los 16 años debutó profesionalmente? ¿Y que en los próximos días tendrá su primer hijo? Él te lo cuenta
Estos son mis orígenes

  • Hasta los 10 años no empecé a jugar. Lo hice porque era un deporte que me gustaba y algunos de mis amigos me dijeron que practicase. Empezamos a hacerlo en mi ciudad, Podgorica, y a esa edad ya entré a formar parte de las categorías inferiores del Buducnost.
  • Fue una infancia complicada… La Guerra de los Balcanes no afectó de lleno a Montenegro pero se podían sentir las consecuencias del conflicto. No era sencillo crecer en esas condiciones, parecía todo una pesadilla. Son duros esos recuerdos.
ACB Photo
  • … pero fui un niño normal.Era como el resto. Iba al colegio y después me quedaba en la calle jugando al fútbol o baloncesto con el resto de colegas. Tuve una infancia como la de otros niños.
  • Orgulloso de mi familia. Mi padre trabajaba en una fábrica y mi madre siempre cuidó de mi familia. Además, tengo una hermana.
  • A los 16 años llegué al primer equipo. Desde los 10 años fui pasando por diferentes categorías en el Buducnost, cada año iba avanzando. Se me daba bien y tuve el entrenador confió en mí, por lo que a los 16 años me pusieron a entrenar y jugar con el primer equipo. Desde ese momento ya estuve con “los mayores”, ya que me quedé en el senior de forma definitiva.

Así fue mi carrera

El escolta que acabó de pívot
Muchos informes suyos corrieron por la NBA por ver a un tipo tan alto moverse tan bien en la pista. Sekulic se hizo un nombre en Europa antes de los 20 años jugando incluso de escolta.
  • Podía jugar en cualquier posición. Al principio podía desempeñar muchos roles diferentes y jugar en muchas posiciones distintas, incluso de base o escolta. Luego ya, en el primer equipo, empecé a centrarme en 3 posiciones y, con el paso de los años, me fui definiendo como un 4/5.
  • El Buducnost, mi equipo. Allí pasé los días más bonitos de mi carrera baloncestística, es como el equipo de casa, el que más me gusta. Tengo grandes recuerdos jugando con mis amigos allí, es precioso rememorarlos. Jugar en el conjunto de tu tierra siempre es algo especial.
Foto Euroleague
  • Poco que decir del Partizan. Fue una etapa bastante corta, estuve allí solo un año. Es un equipo grande y se notaba el cambio, aunque tampoco estuve allí demasiado tiempo como para decir mucho más.
  • El AEK, mi adaptación. Era un grande que jugaba ese año la Euroliga, con una buena plantilla entrenada aquel año por Katsikaris. Supuso mi primera experiencia fuera del país. Al principio la verdad es que costó bastante adaptarse, aunque a la larga fue una vivencia positiva.
  • Mi oportunidad, en el Marousi. Es un equipo esencial en mi trayectoria ya que me permitió la oportunidad de jugar muchos minutos, y con un gran técnico. Confiaban enormemente en mí y aprendí muchísimo.
  • El PAOK, un trampolín. Tenía también una plantilla interesante que me llevó a ser uno de los referentes y líderes de ese equipo. Me salió muy bien aquella temporada y, en enero, el Real Madrid entró en escena para ofrecernos una gran oportunidad. A mí por ir allí y al equipo por cobrar la cláusula de salida, ya que comparon mi pase. Era una situación ideal para ambas parts.
Foto Sonia Cañada
Con el respeto de Plaza
En el Real Madrid nunca tuvo un rol protagonista pero siempre arañó sus minutos y dejó buen sabor de boca. “Siempre que está en la cancha suma y muy pocas veces resta. La pena es que no pueda jugar más porque la verdad es que se lo merece”, dijo el técnico.
  • El Real Madrid, siempre especial. Es una de las mejores experiencias que he tenido como jugador de baloncesto. Compartí equipo con profesionales brillantes, así como su entrenador. Ganamos 2 títulos, la ACB y la ULEB Cup. Siempre tendrá un lugar especial en mi carrera.
  • Aris Salónica, un pequeño paso atrás. No salió demasiado bien la cosa, nada funcionó, y acabé yéndome a mitad de temporada, en enero o febrero, debido a sus problemas económicos.
  • Otro gran paso en el Alba Berlín. Comparativamente, fue mucha mejor experiencia que la del Aris. Allí me lo pasé genial. La organización del club era ejemplar y conectaba con el técnico. Lo hicimos bien y nos llevamos una Copa, además de alcanzar la final de la Eurocup. Es otra de las grandes etapas de mi trayectoria.
Foto Euroleague/Getty
Una particular revancha
Su primer partido contra su ex tras salir del Real Madrid fue con el Alba Berlín. Aquel 12 de marzo de 2009, Sekulic sumó 21 puntos, 8 rebotes y 27 de valoración contra su ex equipo. Uno de los grandes partidos de su carrera.
  • Vanoli Cremona, como una familia. Estuve bien en Italia pero para mí supuso otro gran cambio profesional y personal. Pasé de una ciudad tan gigante como Berlín a otra localidad mucho más pequeña, aunque la gente era encantadora y apasionada del basket. Fue un club pequeño pero familiar.
  • UCAM Murcia, una situación nueva . Resultó una de las temporadas más complicadas que viví. Teníamos un equipo sólido pero no lo hicimos nada bien, no estuvimos a un buen nivel y, por ello, acabamos condenados a luchar hasta el último partido de la temporada para permanencer en ACB. Nunca había estado en una situación así, era algo nuevo para mí y me pareció bastante duro eso de esperar hasta el último día para respirar tranquilo.
EFEDOS / Javier Bernal

Mi etapa en el CB Canarias

  • La situación ideal. Me encuentro muy cómodo aquí, en una gran situación. Sí, estoy muy lejos de casa, pero la gente me trata muy bien. Conecto con mis compañeros y con el entrenador y me gusta la ciudad.
Inicio pletórico
El montenegrino empezó la temporada pletórico. En solo 2 jornadas está en el Top5 en anotación (3º, con 17,5 puntos por partido), % en tiros de 2 (4º, con un 66,6%), faltas recibidas (3º, con 5,5) y valoración (5º, con 21)..
  • Esto es lo que yo quería. Se juega al baloncesto que me gusta y tanto la pasada campaña como en esta me he convertido en uno de los líderes del equipo, lo cual es importante para mí es este momento de mi carrera.
  • Me costó pillar la forma. El año pasado tuve una lesión que me obligó a parar durante 4 semanas y después de eso resultó complicado ponerme en forma sin haber participado en los entrenamientos. Me costó bastante jugar la primera parte de la temporada estando fuera de tono.
  • Mi adaptación, un hecho. También era un reto adaptarme al nuevo equipo pero, a partir de enero más o menos, además de que mi nivel de forma era mucho más óptimo, empecé a sentir que comprendía mucho más el sistema y nuestro juego. A partir de ahí, comencé a jugar mucho mejor y logramos ganar bastantes partidos.
ACB Photo / J. Bernal
  • Lo de ahora, la continuación. Este año es solo una continuación de lo vivido la pasada temporada, de cómo terminé la campaña. Todo fue perfecto entonces y todo va perfecto hasta el momento.

Así soy fuera de la pista

  • Alguien simple y familiar. Lejos de la cancha me considero una persona normal y sencilla, que me gusta hacer cosas simples con mi familia.
  • Mi tiempo libre, para los míos. La mayoría del tiempo estoy con mi mujer y, de veces en cuando, vienen a visitarme mi hermana o mis padres. Me encanta gastar mi tiempo libre con ellos.
  • Un pequeño Sekulic en camino. En los próximos 9 o 10 días seremos uno más. Espero un hijo. Será nuestro primero… ¡y todavía no hemos decidido su nombre!
  • Sin margen para los hobbies. Tengo poco tiempo libre para dedicarla a mis aficiones. A veces escucho música, otras veo películas, e incluso el martes pasado pude encontrar un hueco para ir a pescar, pero la verdad es que durante la temporada no tengo mucho tiempo para esto. Cuando acabe mi carrera ya podré, ahora sé que no es el momento.
Foto FIBA Europe
Un referente con Yugoslavia
En 2000 y 2002, Sekulic defendió la elástica yugoslava, jugando a gran nivel el Europeo, siempre de categorías inferiores y sin llegar a la absoluta. En 2012, por fin, pudo estrenarse de forma oficial con Montenegro.
  • El honor de ser montenegrino. Jugué con Serbia porque era la única opción, Montenegro era parte aún de la antigua ex Yugoslavia y tenía que jugar con ese equipo. Pero yo soy montenegrino, yo soy de mi tierra, y es un honor y algo muy especial defender la elástica de esa selección nacional.
  • Me quedan 4 o 5 años. Siempre es una pregunta complicada esa del momento de la retirada. Realmente no lo sé muy bien pero creo que me quedan por lo menos 4 o 5 temporadas de carrera profesional. O eso espero.
  • Deseo seguir en el baloncesto. Una vez cuelgue las botas, me gustaría quedarme en el mundo del baloncesto. Aún tengo tiempo para decidir qué hago cuando me retire, pero pienso que mi experiencia podría ser útil para los chicos que empiezan y así lograr ser mejores. Esto es lo que me gusta, lo que mejor sé hacer y deseo seguir en este mundillo del basket.
La opinión de Alejandro Martínez
”Siempre se ha adaptado a los que sus técnicos le solicitaron”, dijo Martínez en su llegada. En un año, su valoración fue incluso más alta, llegando a condicionar el juego interior en función de si seguía o no. “Suma en muchas facetas, a veces salen en las estadísticas y otras no. Hizo crecer al equipo y confiamos en que vaya a más”.

Mi balance de todos estos años

  • El fruto a mi esfuerzo. Mucho ha cambiado respecto a ese chico que empezaba en el Buducnost. Creo que hice muy buen trabajo y he tenido una carrera importante.
  • Orgulloso de lo vivido. Estoy viviendo mi sueño porque, de niño, tenía el sueño de ser un jugador profesional de baloncesto y jugar en diferentes países, al nivel más alto posible. Pensar que lo he logrado me hace sentir muy orgulloso.
ACB Photo / Ángel Pérez
  • El basket me hizo mejor persona. Creo que el baloncesto incluso me mejoró a mí mismo como persona. Aprendí de muchos equipos por los que pasé, conocí a nueva gente e hice muchos amigos por el camino. Me siento orgulloso de esos equipos que formaron parte de mi carrera. Simplemente, he estado viviendo mi sueño.
  • Mi momento más feliz, en el Real Madrid. Haciendo balance de mi carrera, creo que en este sueño del que hablo el momento cumbre lo viví en mi etapa madridista. Me sentí el hombre más feliz del mundo cuando fiché por el Real Madrid y encima pudimos ganar la Liga. Mi otro gran momento es jugar con mi selección nacional y además ser el capitán.
  • … y en la vida, está a punto de pasar. Fuera del basket, mi mejor momento en todos estos años fue la felicidad por haberme casado con mi mujer. Y ahora, juntos, esperamos a nuestro hijo en días. Es lo más grande que hemos podido vivir.

Daniel Barranquero
@danibarranquero
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