"Todo va perfecto hasta que se cierra la niebla en el aeropuerto Tenerife Norte. En esas situaciones la cosa se complica mucho", señala la cuenta @controladores en la red social X.

Desde esta cuenta señalan que en este tipo de situaciones de escasa o nula visibilidad "se producen esperas (de aeronaves) en el Norte para ver si se abre hueco, hasta que las tripulaciones van solicitando desviarse al (aeropuerto Tenerife) Sur. Cuando se producen los desvíos se coordina vuelo a vuelo en una coordinación precisa y rápida a 3 entre los controladores de aproximación de Tenerife Norte, Tenerife Sur y los del Centro de Control de Canarias. Los controladores de Tenerife Sur son los que llevan "la peor parte" ya que son los responsables de integrar los desvíos en el tráfico de su aeropuerto, viendo en cuestión de minutos cómo se les duplica el volumen de tráfico. La buena coordinación impide que todo se convierta en un caos.