La presión mediática que está sufriendo desde que el pasado miércoles la revista 'Semana' publicó sus apasionados besos con Carlo Constanzia está superando a Alejandra Rubio. A pesar de que la hija de Terelu Campos está acostumbrada a las cámaras desde que era un bebé, no se imaginaba que tras dar un paso al frente y confirmar su incipiente relación con el hijo de Mar Flores la presencia de reporteros a las puertas de su casa sería una constante para intentar obtener el primer 'posado' de la nueva pareja. Alejandra ha estallado, nerviosa y huyendo de la prensa, afirmando que la situación la tiene sobrepasada.