Con la subida de la luz en plena ola de frío, ahorrar en la factura eléctrica puede llegar a ser toda una odisea, y aunque no parece fácil, siempre se puede ahorrar algo. Lo primero que recomiendan los expertos es ajustar la potencia contratada a nuestras necesidades. Es Necesario saber qué contrato, qué modelo de contador y qué tipo de tarifa tenemos. Una vez ajustada nuestra tarifa, hay una serie de consejos prácticos para el día a día. Importantísimo: ojo con la calefacción… durante los días más fríos suele provocar un gasto extra que en muchos casos es innecesario, ya que 21 grados son suficientes para calentar un hogar.