En mayor o en menor medida, todos nos vemos obligados a cocinar cada día. Hay quien tiene más destreza y otros no se desenvuelven bien en la cocina. Pero incluso el más espabilado puede estar cometiendo un error a la hora de poner una sartén con aceite al fuego que la mayoría de la población desconoce hasta el momento.

Existe un error que muchas personas cometen a la hora de echar aceite a la sartén y que vamos a tratar de explicar para que a partir de ahora tus recetas salgan todavía mejor.

Un error muy habitual en la cocina

El error es no saber que la temperatura del aceite influye en el sabor y en la textura de los alimentos que cocinamos en la sartén. Lo habitual es que agregues el aceite a la sartén cuando aún está fría y luego la coloques al fuego. Los expertos recomiendan todo lo contrario, que es poner la sartén vacía al fuego y echar el aceite una vez se haya calentado.

Esto es así porque si el aceite pasa mucho tiempo al fuego puede generar humo y liberar sustancias que luego alteran el sabor de tu receta, aportando un sabor amargo, como si el plato se hubiese quemado, pero sin estarlo. Esto puede arruinar una receta deliciosa en la que has puesto toda tu ilusión por hacerla lo mejor posible.

Los cocineros expertos recomiendan a los aficionados a la cocina agregar el aceite a la sartén ya caliente, también porque es de gran utilidad para evitar que la comida se pegue. Una vez la sartén se ha calentado, el aceite puede penetrar con mayor facilidad en las grietas de la superficie, creando una especie de sellado que luego impide que se peguen los alimentos. El resultado es una cocción más sabrosa y homogénea que te ayudará a crear platos perfectos como si fueras un auténtico chef.