La corona forestal es la zona de máximo riesgo de incendios en Tenerife

El plan para la prevención y extinción de este verano se fija como principal zona a vigilar este parque natural que ya sufrió el peor incendio del pasado año en Tenerife

Un bombero forestal bebe agua durante el gran incendio del pasado verano en el Norte de Tenerife.

Un bombero forestal bebe agua durante el gran incendio del pasado verano en el Norte de Tenerife. / ANDRÉS GUTIUÉRREZ

La corona forestal que rodea el Parque Nacional del Teide es la zona de máximo riesgo de incendio forestal en Tenerife, según el plan anual para la prevención, vigilancia y extinción de fuegos en los montes aprobado por el Cabildo. El documento incluye un análisis pormenorizado de la realidad física de la Isla, de los riesgos, la climatología y la vegetación, además de una descripción detallada del Operativo Brifor, así como la regulación de usos y prohibiciones.

El parque natural de la Corona Forestal es una zona medioambiental protegida, cuyas 46.612 hectáreas lo convierten es el mayor espacio natural con protección de Canarias –Tenerife tiene el 48% de su superficie con esta condición–. Se extiende desde unos 300 metros sobre el nivel del mar hasta los 2,718 del Alto de Guajara

Cabe recordar que el gran incendio del pasado verano en el norte de la Isla, que afectó a unas 2.000 hectáreas, afectó en parte a algunas de las masas boscosas dispuestas alrededor del parque nacional del Teide dentro de los municipios de Los Realejos –el gran afectado por aquel fuego originado en la zona de Los Campeches–, Adeje, Vilaflor, Guía de Isora, Santiago del Teide, Garachico, Icod de los Vinos, La Orotava, La Guancha, San Juan de la Rambla, Granadilla, Arico, Fasnia, El Tanque, Güímar, Arafo, Candelaria y La Victoria de Acentejo. El parque natural supone, además, la cabecera de gran parte de los barrancos que conforman la red de drenaje del norte y sur de la Isla. Su papel es clave en cuanto a la conservación del suelo frente a fenómenos erosivos, y también, en lo que se refiere a la captación de aguas.

El Consejo de Gobierno del Cabildo de Tenerife aprobó esta semana el plan anual contra los incendios forestales, un documento que incluye las diferentes actuaciones a desarrollar, tanto a nivel preventivo como operativo. Además de la corona forestal, incluye como zonas de especial riesgo ante estos fenómenos los parques naturales de Anaga y Teno.

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Efectivos

Un total de 327 trabajadores del Cabildo forman el operativo. A ellos se suman desde abril 122 de refuerzo, así como los 42 del Parque Nacional del Teide. En total, 591 efectivos.

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Vehículos

Además del siempre fundamental en caso de incendio vehículo de Puesto de Mando Avanzado (PMA), la planificación contempla otros 29 todoterreno destinados al transporte.

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Autobombas

El operativo terrestre lo componen tres autobombas nodriza con capacidad para 9.000 litros, 14 forestales de entre 3.500 y 5.000, dos medianas de 1.800 y otras 30 ligeras de 500.

Todo preparado

El presidente insular en funciones, Pedro Martín, asegura que «durante este mandato que ahora finaliza el dispositivo contra incendios ha sido una prioridad». Subraya que «desde el Cabildo hemos incrementado el número de personas dedicadas a este trabajo e invertido en la compra de nuevo material y vehículos». Valora: «Ahora, nuestra intención es que el nuevo equipo de gobierno tenga todo preparado y en orden desde que tome posesión, en caso de que se produzca un siniestro de estas características».

El plan contra incendios incluye un análisis pormenorizado de la realidad física de la Isla respecto a su régimen térmico y de vientos, las precipitaciones, la vegetación o las áreas protegidas. También ahonda en la peligrosidad de los incendios forestales, en la vulnerabilidad del territorio insular y en especificar las zonas de alto riesgo de incendio forestal.

El documento recoge asimismo una descripción detallada del operativo de prevención y lucha contra incendios del Cabildo de Tenerife (Brifor), en el que se incluyen los medios aéreos y terrestres de extinción, los sistemas de vigilancia y detección de incendios, el modelo de organización o los medios externos disponibles. Asimismo, contiene los trabajos de carácter preventivo a realizar a lo largo de todo el año –en particular los tratamientos selvícolas, áreas cortafuegos, vías de acceso y puntos de agua–, la regulación de usos y prohibiciones y la planificación en el ámbito local.

Operativo Brifor

Un total de 327 personas trabajan ya en el operativo contra incendios forestales desplegado por el Cabildo de Tenerife con el objetivo de prevenir que se originen fuegos en los espacios protegidos de la Isla. Los operarios bajo el mando insular están desplegados durante todo el año con labores de dirección, prevención, control y extinción. A ellos se suman, desde el pasado mes de abril, los 122 trabajadores de refuerzo al operativo, que estarán desplegados hasta mediados de diciembre, así como los 42 efectivos propios del Parque Nacional del Teide.

En lo que respecta al operativo terrestre, este año se han incorporado seis nuevas autobombas forestales con capacidad para entre 3.000 y 4.500 litros y cinco más ligeras que pueden acumular hasta 500 litros. El operativo terrestre estará compuesto al completo por tres autobombas nodriza con capacidad para 9.000 litros, 14 forestales para entre 3.500 y 5.000 , dos medianas de 1.800, otras 30 ligeras de 500, más un vehículo de Puesto de Mando Avanzado (PMA) y 29 todoterreno destinados al transporte. A nivel aéreo se suman dos helicópteros con base en el aeropuerto Tenerife Sur y tres drones que cuentan con cámara termográfica y visual para la toma de imágenes y videos.

El despliegue está a punto. Además de los factores meteorológicos como son el calor, la humedad o el viento, su efectividad depende del más importante e imprevisible de todos: el humano.

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