La playa del muelle de Garachico se reabrió al baño en la tarde de ayer después de que los análisis y cultivos del agua de la zona descartaran cualquier tipo de contaminación o vertido peligroso para los usuarios. El alcalde del municipio, José Heriberto González (CC), confirmó que los expertos han certificado que el agua es apta para el baño, por lo que el Ayuntamiento norteño procedió a su reapertura inmediata.

El cierre de la playa del muelle de Garachico se produjo en la tarde del pasado sábado 28 de agosto tras detectarse que el agua estaba turbia y tenía un color verdoso inusual, cuyo origen no se ha podido determinar pese a los estudios realizados. La principal hipótesis que se maneja es una proliferación de algas debido al estancamiento del agua, el sol y las altas temperaturas de los últimos días en la Isla Baja.«Cerramos por precaución en la tarde del sábado, pero hasta el lunes no fue posible hacer las analíticas del agua», detalla González, quien añade que «los expertos nos recomendaron hacer un cultivo de 48 horas para poder detectar de forma más fiable la presencia de cualquier tipo de bacteria». Los resultados arrojan «parámetros normales» y no hay presencia de ningún elemento nocivo que justifique su cierre.Respecto al origen del color verdoso del agua, el alcalde señala que se cree que puede tratarse de un fenómeno relativamente habitual, aunque en menores proporciones: «Hemos tenido mareas muy quietas y mucho sol, lo que ayuda a la proliferación de algas o microalgas». Lo que sí tiene claro el Ayuntamiento de la Villa y Puerto es que el cambio de color del agua de la playa del muelle «no tiene nada que ver con vertidos ni con aguas residuales». Esa posibilidad ha quedado descartada tras los análisis y tras comprobarse que no se ha producido ninguna incidencia en las dos estaciones de bombeo de la costa garachiquense.«En el pasado se han detectado algunas manchas similares, aunque de menor tamaño, así que nos inclinamos a pensar que estamos ante un fenómeno natural que generó inquietud y que, por producirse un sábado, nos ha obligado a tener cerrada la playa unos días más de lo que nos hubiera gustado», recalca González. El color y la turbidez del agua generaron cierta alarma entre los usuarios durante el fin de semana, pero en los últimos días la ensenada del antiguo muelle ha ido recuperando su color habitual y vuelve a estar de nuevo disponible para los bañistas.

Cambian el agua del Lago Martiánez

El agua del Lago Martiánez, en Puerto de la Cruz, también presentaba este martes un color verdoso, por lo que el Ayuntamiento optó por vaciar la instalación. Con el cambio de agua, el complejo recuperó ayer la normalidad.