Una fachada completamente renovada –que sustituye el color terracota por el blanco–, una nueva marquesina de acero con techo de cristal, una recepción totalmente cambiada, una lámpara escultórica con más de 800 hojas de cristal en suspensión sobre una amatista de 450 kilos en el hall, un gran acuario con 10 medusas... El Hotel Botánico & The Oriental Spa Garden, el cinco estrellas de Puerto de la Cruz, reabrió sus puertas ayer tras 17 meses cerrado con una imagen completamente renovada, en busca de más luminosidad, sofisticación y presencia de obras de arte.
El Grupo Loro Parque aprovechó el parón, como consecuencia de la pandemia de la covid-19, para rehabilitar este hotel emblemático de la ciudad turística que mantiene, eso sí, su estilo clásico de siempre con detalles de inspiración oriental. Todo ha sido mejorado: el bar del hall, las habitaciones, el restaurante, el área de piscinas, los jardines, incluso su imagen corporativa y la página web.
El presidente del Grupo Loro Parque, Wolfgag Kiessling, y su familia estuvieron arropados en la reapertura del Hotel Botánico & The Oriental Spa Garden por el presidente del Cabildo de Tenerife, Pedro Martín; el alcalde de Puerto de la Cruz, Marco González; la consejera de Turismo del Gobierno de Canarias, Yaiza Castilla; y el presidente de la patronal tinerfeña (CEOE), José Carlos Francisco, entre otras autoridades. Todos coincidieron en alabar a los propietarios por haber aprovechado el parón de la pandemia para mejorar uno de los hoteles con más historia de Tenerife, uno de los primeros de lujo de Puerto de la Cruz cuando el municipio se abrió al turismo de masas centroeuropeo en los 70. «Es una apuesta que afianza la calidad de los establecimientos de Canarias y su renovación», señaló la consejera de Turismo, Yaiza Castilla. Han sido 17 meses de intenso trabajo para terminar de dar un impulso a un hotel que los Kiessling rescataron cuando estaba abocado a la ruina. Hoy reluce más que nunca.
