El invierno es la temporada alta para el turismo en la Isla. El último trimestre del año se presenta como la gran esperanza para la reactivación del sector que ejerce desde hace décadas como el motor económico. Desde Turismo de Tenerife, su consejero delegado, David Pérez, es relativamente optimista y anuncia: «Tenemos 235.000 plazas de turismo británico reservadas de octubre a diciembre». Ejemplo de remontada posterior a lo peor de la pandemia y el confinamiento es la ciudad turística por antonomasia, el Puerto de la Cruz. Durante estos días, un hervidero de visitantes, sobre todo peninsulares. Roberto Medina, su concejal de Promoción Turística, entre otras áreas, lo resume: «Los datos son tan alentadores como sorprendentes por positivos entre junio y agosto».

Medina valora: «El 80% de los establecimientos alojativos han reabierto sus puertas». Los que no lo han hecho es porque «están en proceso de obras de rehabilitación. En algunos casos incluso para subir de categoría. o por razones empresariales, al pertenecer a una cadena que ya ha procedido a la reapertura de otros».

En cuanto a la ocupación, resalta que «algunos ya llegan al 60% y al 70%, cifras normales en el verano, nuestra temporada baja». Respecto a la procedencia, apunta, «destacaría a los franceses como novedad», según los datos recogidos la oficina turística de la Casa de la Aduana». Recuerda que el 60% del mercado «son peninsulares».

Medina muestra cierto orgullo cuando advierte de que «las calles está llenas de gente y se nota un gran ambiente en las terrazas y espacios exteriores. Hay ganas de disfrutar, aunque siempre con precaución y con todas las medidas sanitarias anticovid» . El concejal subraya «las buenas conexiones con el Aeropuerto Tenerife Norte» y las características de un visitante muy fidelizado que «siempre vuelve de Sevilla, Bilbao, Madrid. El que viene al Puerto repite». Pese a la reducción de aforo al 33%. Roberto Medina destaca que «el Lago Martiánez se llena todos los días hasta alcanzar las 1.500 plazas ofertadas dentro de ese límite establecido».

Medina considera que «la clave es que este destino ha resistido a la pandemia y ha mantenido su posicionamiento en el mercado, incluso durante los peores momentos». Por eso, añade, «hemos mantenido la oferta a los valientes turistas que vinieron con todas las medidas de seguridad». De ahí, «la apuesta se mantiene después de lo que esperamos sea lo peor de la Covid-19 con un repunte global respecto al año pasado del 88%».

El secreto del éxito.

Medina explica que «el turismo de fuera se funde aquí con el residente, además de que la gente de la comarca y de todo el Norte ha respondido al que es su motor económico. Sin olvidar al turista de otras Islas que tampoco nos ha abandonado». Un síntoma de recuperación «es que ya apenas se ven taxis en las paradas. Llegan y salen de inmediato con clientes». De todas formas, el concejal matiza su optimismo: «La pandemia está ahí y las cosas pueden cambiar de un día para otro, pero una fortaleza es que la clave está en la sensación y la confianza del turista en el destino y aquí se dan». Medina destaca que el Puerto sea «el único municipio de Canarias con el Sello de Calidad Turística de España» y que «todos nuestros espacios están certificados como seguros, garantía para el sector empresarial y para los turoperadores».

El invierno, la gran esperanza del turismo

Planta alojativa.

Medina valora que «tenemos una planta alojativa en renovación y en eso somos pioneros. Con hoteles más pequeños que en el sur pero con la calidad de ser un destino tan fidelizado». Recuerda que hay cuatro hoteles ahora en renovación completa: San Telmo, Los Príncipes, Taoro y Turquesa. Medina resume: «Vendemos algo más que sol y playa con todo incluido; un entorno especial con buen servicio o una oferta cultural con continuidad todo el año. Un destino que garantiza actividad y experiencias para el que lleva tantos meses en teletrabajo». El concejal enfatiza: «Hay algún problema con los coches de alquiler, que la gente reclama por mayor seguridad, pero considero que se está resolviendo a través de los pequeños negocios de rent a car. Hay que reinventarse en el proceso para volver a la normalidad». Concluye: «El Puerto de la Cruz es el corazón de Tenerife con una conectividad garantizada, incluso con el Sur de la Isla».

Esperanzas y certezas.

David Pérez, consejero de Turismo de Tenerife, transmite esperanza, pero también algunas certezas respecto a la recuperación del turismo en la temporada alta de la Isla, el invierno. En este sentido, deja claro que “tenemos 235.000 plazas reservadas de turismo británico para esos meses”. Pérez aclara que “no aparecer ahora en el ranquin de TUI UK –crítica del PP– no significa nada en realidad porque tradicionalmente en temporada baja, los mercados preferidos, con la excepción de 2019, son Baleares y la Costa del Sol». El consejero añade: «Desde Turismo de Tenerife no motorizamos por empresas sino por nacionalidad y analizamos el mercado británico como un conjunto». Lo primero que advierte es sobre “los muchos y rápidos cambios de tendencia. Con la pandemia las cosas cambian casi de un día para otro». Sobre la campaña de invierno que reclama CC se pregunta «a qué se refieren y qué medidas concretas proponen. Nosotros tenemos una estrategia clara de reposicionamiento del destino y buscamos la promoción en el origen de todos los mercados. Hemos dado un salto cualitativo y cuantitativo. Al tener menos recursos públicos hemos tenido que recurrir a la promoción inteligente. A través de la monitorización de las tendencias sobre qué destinos se buscan y para qué». Añade: «No dependemos de un solo mercado como el británico, sino que, por ejemplo, ha repuntado el alemán, al igual que el francés, y nos hemos presentado en Europa del Este, en las Repúblicas bálticas e Islandia, además de iniciar la recuperación del mercado de los países nórdicos. Sin olvidar la apertura de nuevas rutas con Ucrania (Kiev) o Israel (Tel Aviv), así como la consolidación de la conexión con Moscú a través de Aeroflot. Soy optimista también porque el viajero en estas condiciones no va a buscar lugares lejanos por seguridad sanitaria. Querrá garantías y se las podemos dar porque con respecto a Europa somos un destino relativamente cercano. En relación a la ocupación y al 45% que apunta Ashotel para este mes de agosto , Pérez estima que «es algo impredecible porque igual que hay reservas de última hora también se dan las cancelaciones. Recuerdo que esta quinta ola no se vio venir. Hay buena sensación de superar las expectativas pero habrá que esperar para conocer los datos».

Recuperación.

Los datos de alojamiento turísticos en los seis primeros meses del año sí que traducen con claridad la recuperación. Puede parecer fácil con un año negro como 2020 pero la mejora es abismal. Según datos del ISTAC, entre enero y junio se alojaron en establecimientos catalogados como turísticos 155.042 personas, frente a las 150.110 en el mismo periodo del año anterior. Un brutal 3.043% de aumento. El turismo nacional, no residente en Canarias sumó 38.695 visitantes, hasta subir en un 2.474%, 37.192 la cifra sobre 2020. La tendencia se mantiene con los residentes canarios que viajaron a Tenerife, un total de 50.949 (48.584 más, un 2.054%). Por último, los extranjeros. Fueron 65.398 los alojados en la Isla, un 6.046% más que en 2020 (64.334). Unas cifras que demuestran dos cosas. Por un lado, el colapso del Año I de la pandemia con casi un cero turístico. Por otro, la recuperación aunque aún tímida, del primer semestre del Año II, pese a la quinta ola.