El Ayuntamiento de El Tanque se sumó al proyecto cultural y social Vidas calladas a través de los testimonios de vecinos y vecinas que colaboran en este trabajo audiovisual y fotográfico de Mogares Doyân, con la financiación de la Dirección General de Juventud del Gobierno de Canarias. Esta iniciativa, que está previsto que se estrene en el mes de junio con una exposición de fotografías y una pieza documental, muestra las experiencias de vecinos y vecinas de El Tanque, Buenavista del Norte, La Orotava o La Victoria de Acentejo que han tenido que enfrentarse a lo largo de sus vidas a prejuicios sociales, discriminación, ideas arcaicas y falta de aceptación social por tratarse de integrantes del colectivo LGTBI (Lesbianas, gays, transexuales, bisexuales e intersexuales); mujeres inmigrantes; trabajadores sexuales, o personas con diversidad funcional.
Moisés García Estévez, responsable de Mogares Doyân, detalla que Vidas calladas es una apuesta por “el fomento de las políticas inclusivas a través de la participación ciudadana”, que se articulará “a través de una docena de vivencias de personas” de estos municipios del Norte de Tenerife, aunque también aparecerán protagonistas de otras localidades e islas.
Aparte de la financiación del Gobierno de Canarias y de la colaboración de los ayuntamientos de La Victoria de Acentejo, La Orotava, Buenavista del Norte y El Tanque, Mogares Doyân ha contado con el apoyo de la Asociación LGBTI* Diversas y de otras entidades y empresas. García Estévez subraya que este proyecto permitirá visibilizar y crear conciencia a través de historias de minorías sociales que sufren especialmente la intolerancia, como es el caso de “personas transexuales, las mujeres inmigrantes o las personas prostitutas”.
El alcalde tanquero, Román Martín, mostraba ayer su satisfacción por el desarrollo de este proyecto audiovisual, cultural, educativo y social en su localidad. Las entrevistas que permitirán componer varias de las historias de este documental se han grabado en localizaciones de El Tanque como el mirador de La Atalaya, que se descuelga sobre Garachico, o huertas de las medianías.
Martín subraya que el gran objetivo de esta iniciativa es “visibilizar a los colectivos LGTBl, las mujeres rurales y las personas migrantes de nuestro municipio y de nuestra comarca”. Un trabajo para el que han podido contar con una importante colaboración vecinal, “especialmente en el caso de las personas que han dado el paso de contar sus historias”. También subraya la labor de Joanna Armas y Roberto Martín Bishop, así como de las concejalas Vanessa Hernández, responsable de Igualdad; Jennifert Rosales, del área de Servicios, y Jhonny Carmenaty, de Cultura.
Los trabajos que componen Vidas calladas se harán públicos a finales del mes de junio en el área metropolitana, si se cumplen las previsiones de Mogares Doyân. Posteriormente se organizará una muestra itinerante que recorrerá los municipios de Buenavista del Norte, El Tanque, La Orotava y La Victoria de Acentejo. Además, existe el interés de otras localidades por albergar temporalmente esta iniciativa artística con una clara vocación social y educativa.
