Un paseo de casi un kilómetro, restaurantes y columpios para la trasera del Palmétum

El Ayuntamiento presenta el anteproyecto para convertir el camino que rodea el jardín botánico en una zona de ocio | La capital ya cuenta con la autorización de la Autoridad Portuaria | La iniciativa incluye accesos al mar en una segunda fase

Vídeo del anteproyecto de la trasera del Palmétum

G. T. M.

La parte trasera del Palmétum, en Santa Cruz de Tenerife, se convertirá en un paseo con vistas al mar de casi un kilómetro de longitud y más de 10.000 metros cuadrados de superficie, que contará con unos tres restaurantes con terrazas, columpios, zona para perros, espacios de estancia con sombra, zonas ajardinadas, varios quioscos de helados o bebidas, y un mirador. El alcalde, José Manuel Bermúdez (CC), ha presentado este miércoles, 15 de marzo, el anteproyecto, denominado Tinglados, para transformar el camino que rodea el jardín botánico (antigua montaña de basura) en una nueva zona de ocio y esparcimiento para la capital, y en el que también se contempla, aunque en una segunda fase, la posibilidad de crear accesos al mar para el baño.

El regidor chicharrero anunció que el Ayuntamiento ya cuenta con la autorización «verbal» de la Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife, propietaria de los terrenos, para acometer esta actuación, la cual supondrá una inversión de unos tres millones de euros. La previsión del Consistorio capitalino es que en 2024 el nuevo paseo marítimo o «anillo del Palmétum» se convierta en una realidad. «Los siguientes pasos que vamos a dar consisten en la firma de un convenio con Puertos de Tenerife para la cesión de los terrenos, en el encargo de la redacción del proyecto definitivo y en la licitación de las obras», apuntó José Manuel Bermúdez.

Con esta actuación, y según resaltó el alcalde de Santa Cruz, se dotará al municipio «de una nueva opción de ocio, de un sendero litoral que ofrecerá a los ciudadanos diversos equipamientos o servicios, convirtiendo en un lugar atractivo un camino de tierra que ya es utilizado por algunas personas para pasear o realizar actividades físicas».

El regidor  aprovechó para señalar que esta «novedosa» iniciativa se enmarca en una de las principales prioridades del Ayuntamiento chicharrero, la recuperación del litoral. «La creación de este nuevo paseo junto al mar se suma a otras actuaciones que ya hemos llevado a cabo, como la mejora de las zonas de baño Acapulco-El Bloque (Valleseco), y a otras que se están preparando, como la Playa de Charcos de Valleseco, el proyecto de piscinas naturales para Añaza o la mejora del frente marítimo de San Andrés», agregó Bermúdez.

El concejal de Infraestructuras, Dámaso Arteaga (CC), aclaró que la intervención en la parte trasera del Palmétum se ha dividido en dos fases. La primera es la que se ejecutará «a corto plazo», que es la que incluye el paseo y los diferentes equipamientos, como los restaurantes. La segunda consiste en la creación de accesos al mar, pero, admitió Arteaga, «somos conscientes de que ésta es más difícil, pues también se tiene que pedir autorización a Costas y, además, hay que esperar a que finalice la obra de ampliación de la depuradora, para que se pueda permitir el baño en esta parte del litoral».

Por su parte, el concejal de Servicios Púbicos y responsable del Distrito Salud-La Salle, Carlos Tarife (PP), destacó la importancia de este proyecto «para seguir recuperando espacios junto al mar» y recordó que esta iniciativa surgió «gracias a un vecino que solicitó un informe a la Gerencia de Urbanismo sobre la posibilidad de intervenir en este espacio».

Tres tramos

El arquitecto que ha redactado el anteproyecto, Alejandro Beautell, explicó que el ámbito de actuación se ha dividido en tres sectores, que coinciden con los tramos que se generan según las diferentes orientaciones del paseo (hacia la Refinería; el más pegado al mar, y hacia el Auditorio); «de esta forma el proyecto podrá ser ejecutado por partes, según las necesidades que surjan». El recorrido peatonal o sendero litoral, que bordea el Palmétum a naciente y al sur, conectando la avenida de la Constitución con la playa del Parque Marítimo, tendrá una longitud de casi un kilómetro y una superficie de más de 10.000 metros cuadrados. Estará situado junto a la escollera y su ancho será de unos 10 metros. Y junto al camino, y en la parte más próxima al Palmétum, se establecerá «una banda de servicios y equipamientos de ocio», con un ancho de unos seis o siete metros.

Servicios

En concreto, el paseo contará con unos tres restaurantes, uno por cada tramo; parques infantiles «de madera»; zona para perros; quioscos de helados o bebidas;espacios de estancia con sombra; zonas ajardinadas y un mirador. Con respecto a los restaurantes, el arquitecto plantea un diseño en el que se mezcla el concepto de chiringuitos de playa y de «reinterpretación de contenedores». «La idea es que no sean necesarias grandes construcciones, sino módulos que recuerden a los puestos de siempre relacionados con el litoral, como aquella Caseta de Madera que estaba situada en Los Llanos», apuntó.

Sistema modular

En cuanto a los aspectos más técnicos, Beautell explicó que, además del acondicionamiento del paseo, las obras proyectadas en la zona de los equipamientos «consistirán en una construcción formando parte de un sistema ligero y modular, que tiene como base geométrica una malla, que relaciona la escala del proyecto con el tamaño de los cubos de hormigón que forman la escollera». Los módulos que albergarán los servicios serán «autoportantes» y se cerrarán con planchas metálicas, «tomando como referencia los contenedores tan presentes en el paisaje del frente marítimo de la capital».

Pérgola

Asimismo, añade el arquitecto, se plantea una estructura modular de madera «a modo de pérgola». «Cada elemento vertical estará compuesto por cuatro pilares de madera, que se apoyarán en una base de hormigón cuadrada. La estructura será continua en cada uno de los tres tramos previstos, manteniendo separaciones de mínimas de 50 metros entre ellas y alternando espacios con plantación de vegetación».

Cubierta

La cubierta de la franja de equipamientos podrá ser totalmente cerrada con placas fotovoltaicas; semicerrada con una celosía de lamas de madera para proveer de sombra a las zonas de terrazas, o totalmente abierta en los espacios de juego y jardines.

Plataforma

La plataforma donde se disponen los módulos de equipamientos estará ligeramente elevada sobre el nivel del paseo, «potenciando las imponentes vistas existentes y estableciendo una separación por usos».