Opinión

Salud mental en Atención Primaria

psiquiatría nutricional, una novedosa ayuda para la salud mental

psiquiatría nutricional, una novedosa ayuda para la salud mental / Foto de Kampus Production: https://www.pexels.com/

¿Psicólogo/a de cabecera en Atención Primaria? La respuesta puede ser unánime, dada la importancia de la salud mental para el bienestar y la calidad de vida, y se podría reivindicar ya, como existe el médico o la médica de cabecera para la salud física.

La salud mental es una prioridad, dadas las cifras de población con trastornos psicológicos, con y sin medicación (25%) que según la OMS sufren las personas a lo largo de su vida, y que serán la principal causa de discapacidad en el mundo en 2030 (¡¡dentro de siete años!!). Imaginemos esa proporción numérica en personas reales (1 de 4) aplicada a una familia, a una calle, a un barrio o ciudad entera… La salud mental no es solo un problema ajeno, sino un tema que afecta al conjunto de la sociedad. Ver la paja en el ojo ajeno suele ser un arma arrojadiza (con trayectoria hacia arriba, sin darnos cuenta).

La salud mental no es blanco o negro, sino un continuo cromático que va de un mínimo a un máximo de bienestar psicosocial que cualquier persona puede experimentar subjetivamente ante una circunstancia externa o pensamiento. Así puede sentir desde el peor sufrimiento (ansiedad, angustia y depresión), al bienestar general. Sobre si hay edades más desatendidas, recientes titulares de prensa lo apuntan: la falta de psicólogos/as lastra atención salud mental juvenil en sanidad pública… o el seguro escolar un salvavidas para salud mental juvenil, etc.

La salud mental de una persona depende de las circunstancias tanto externas como internas, sean permanentes o pasajeras, en la línea orteguiana: “yo soy yo y mi circunstancia y si no la salvo a ella no me salvo yo”. Si cada persona supiera cómo protegerse de ciertas circunstancias negativas no haría falta ninguna ayuda experta, pero en muchos casos eso no es así. El saber valorar con distancia emocional y perspectiva más objetiva una situación lo manejan mejor los profesionales de la salud mental por estar entrenados en evaluar desde fuera ese binomio subjetivo persona-circunstancia y, por tanto, poder tratarlo mucho más eficazmente.

Un ejemplo pre-pandemia de cómo una circunstancia real y cotidiana puede ser más negativa o menos psicológicamente, según el afrontamiento subjetivo de los 2 protagonistas: una persona A de vacaciones se sienta en un banco a orillas de un lago urbano del extranjero y se pone a escribir en su cuadernillo. Al momento, otra persona B de un grupo que está sentado en el césped, a unos 8-10 metros detrás, a la izquierda de su espalda, salta del parterre y pasa a su lado hablando en alto y se apoya en la baranda del borde del agua, a unos diez metros enfrente de A, y se queda mirándole fijamente. La interpretación lógica que hace A es de algo contra ella, y se asegura mirando hacia atrás y viendo que no hay nadie más en esa dirección. B sigue hablando en alto y gesticulando, A piensa en qué ha pasado allí… si tal vez B habrá creído que ella ha estado apuntando lo que dicen en el grupo de B. La situación es angustiosa y tensa para A, y en segundos piensa qué puede hacer para parar aquello y demostrar que no les ha estado espiando… —hablar con B no, porque está muy alterada— y decide probar de hacer ver a B su malentendido, mirando enfáticamente su cuadernillo, después su bolígrafo y girándose al grupo de B y al boli de nuevo... Inmediatamente A mete ambos objetos en un bolso y mira al suelo negando con la cabeza, y deja de mirar a B, fijándose en la gente que pasea por allí, ajena al tema.

En treinta segundos B regresa con su grupo y al poco se van, y la persona A se queda sentada, ahora menos ansiosa, pero con temores lógicos de si escribir así es desaconsejable o mejor hacerlo ya en móvil, y apunta todo el suceso en su cuadernillo. En los siguientes días A ve a más personas escribiendo solas y en papel, a orillas de otro lago urbano... Decide seguir escribiendo en papel, en sitios exteriores y también seguir viajando sola y acompañada al extranjero... De la persona B, no se sabe si habrá llegado a más… en público o en privado, con otras situaciones que supuestamente haya malinterpretado en su contra.

Normalicemos una visión desdramatizada de la salud mental en todas las edades en la que intervenir como en una serie televisiva donde se puede ir cambiando y mejorando el guion personal, junto al director/a y resto del elenco social, y hacer de la vida diaria algo mucho más sencillo y agradable.

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