El Partido Socialista en Santa Cruz de La Palma "lamenta profundamente" que la gobernabilidad en la capital haya quedado supeditada "no al interés de nuestro municipio sino a las estrategias políticas ajenas, en el caso del PP y CC, y tal como ha quedado constancia en los diversos medios de comunicación, a los intereses de Madrid".

Los socialistas aseguran que por las direcciones insulares del PSC y del PP "se decidió vincular las negociaciones para cerrar gobiernos y constituir mayorías estables en el Cabildo y en el Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma". Por esta razón, "y por los diversos avatares que se fueron sucediendo en las conformaciones de mayorías en el Gobierno de Canarias y en el propio Cabildo (aún inconclusas), se fue retrasando el cierre y firma del pacto por la gobernabilidad de nuestro municipio, que estaba cerrado prácticamente en su totalidad con antelación a la constitución de la nueva corporación el 5 de junio", desvela el grupo que encabeza Elías Castro.

Y es que "desde el 26 de mayo y hasta el 14 de junio, los cabezas de lista del PSOE y del PP se reunieron en al menos seis ocasiones", sostienen. Los socialistas propusieron a los populares "desde el martes 28 de mayo, la constitución de un grupo estable de gobierno para nuestro municipio".

Este partido cree "evidente" que no solo no gobernará la lista más votada por los ciudadanos, sino que, por el contrario, "lo harán dos formaciones que ya han gobernado en varias ocasiones y por largos periodos de tiempo nuestro municipio, que han sido parte activa de su empobrecimiento, su endeudamiento, su falta de planeamiento urbano o su despoblamiento".

Pese a todo, el PSOE se compromete a llevar a cabo una oposición "rigurosa, responsable, exigente y comprometida con nuestra ciudad", ofreciendo "total colaboración" en los proyectos y gestiones que redunden en benéfico de Santa Cruz de La Palma.

Discrepancias personales

El PSOE cuestiona el gobierno municipal haciendo incluso hincapié en las desavenencias que en un pasado existieron entre el alcalde, Juanjo Cabrera, y el primer teniente de alcalde, Toni Acosta. A propósito, afirma que los partidos que ahora gobiernan la ciudad "se presentaron a las elecciones municipales no solo con serias discrepancias programáticas sino también de índole personal". "Baste con recordar que cuando los actuales cabezas de lista que ahora conforman gobierno compartieron responsabilidades en la corporación, acabaron con denuncias cruzadas entre ellos, comisiones de investigación, comparecencias en juzgados y con la afirmación en campaña electoral de uno de ellos que nunca gobernaría con el otro", sentencia.