El presidente del Gobierno de Canarias, Ángel Víctor Torres, dice estar "preocupado" por la situación de la autovía GC-1, en Gran Canaria, tras el derrumbe de un muro de contención en la entrada a Las Palmas. Al tiempo, reconoce "el civismo ejemplar" de la ciudadanía. A pesar de las colas kilométricas que se repitieron ayer, Torres comprobó, desde primera hora de la mañana, "el trabajo del operativo de las fuerzas y cuerpos de seguridad" y quiso lanzar un mensaje "de reconocimiento a la sociedad grancanaria, que está actuando con un especial civismo".

Torres explica que los conductores "ya se han empezado a desviar por la GC-3" y, aunque sigue habiendo "importantes retenciones", se están llevando "con una ejemplar acción cívica". Hizo hincapié en la colaboración entre las consejerías de Obras Públicas del Cabildo de Gran Canaria y del Gobierno de Canarias, porque el Ejecutivo regional "está a disposición" de la Corporación insular "para aliviar la situación, especialmente compleja en estos primeros días".

Tras recordar que la obra está declarada de emergencia, comenzando los trabajos "de forma inmediata", el presidente de Canarias desea que "cuanto antes se alcance la normalidad", porque "es importante recuperar el tránsito normalizado en la isla de Gran Canaria". Al tiempo, reitera su disculpa y lamenta los retrasos "a todos los ciudadanos que se están viendo afectados" por la situación de la vía.

Por su parte, el presidente del Cabildo, Antonio Morales, dice que la respuesta ciudadana ante las recomendaciones lanzadas por la Institución insular y la Dirección General de Tráfico para reducir los efectos del derrumbe en la GC-1 redujo las retenciones en más de siete kilómetros.

Antonio Morales, así como el consejero canario de Obras Públicas, Sebastián Franquis, y la jefa provincial de la DGT, Eva Canitrot, reconocen "la cívica respuesta de la población". Las retenciones de anteayer, tras el derrumbe ocurrido a las 4 de la madrugada, alcanzó 23,5 kilómetros a las 10 de la mañana, mientras que a la misma hora de ayer el alcance era de 16 kilómetros. Si bien es importante, subrayó Canitrot, "se sitúa más en los niveles propios de esta época del año, en la que algunos días alcanza esta longitud".

Recomendaciones

Una de las recomendaciones en la que insiste el Cabildo es evitar el efecto mirón al pasar por la zona afectada, ya que se registran incidencias por alcance, lo que ralentiza más el tráfico. Otras medidas son evitar el uso de un coche por persona y utilizar el transporte público, aparte de es evitar cambios injustificados de carril y jamás ocupar los arcenes para que estén disponibles para los servicios de emergencias.

Desde la primera noche está la maquinaria pesada en el lugar, donde trabajan permanentemente tres turnos de 30 personas, quienes acometen el traslado de las palmeras para construir los tres carriles paralelos, que estarán operativos el 1 de enero. Mientras se realiza esta obra, se trata de asegurar el terreno para abrir el carril central mañana, para contar con dos carriles de entrada a Las Palmas por la GC-1. En cualquier caso, los vehículos pesados seguirán utilizando exclusivamente la GC-3, señala el Cabildo.