Informe de coyuntura económica del tercer trimestre | El peligro de la estanflación

La economía de Canarias se ralentizará aún más durante 2024

La patronal reclama al Gobierno regional «un fuerte descenso de la presión fiscal» en el IGIC, el IRPF y el Impuesto de Sociedades

Un camarero trabajando

Un camarero trabajando / EUROPA PRESS

Salvador Lachica

Salvador Lachica

El proceso de desaceleración de la economía canaria anunciado por la patronal a principios de año «se hará más palpable a lo largo del próximo ejercicio debido a la estabilización de los flujos turísticos y al traslado del aumento salarial a contrarrestar el incremento de los costes de endeudamiento». Además, «también se anticipa una menor aportación del consumo público, a tenor de la próxima reactivación de las reglas fiscales europeas».

Por ello, el informe de coyuntura económica elaborado por la CEOE de Tenerife respecto al tercer trimestre vaticina que «para 2024, tanto para el Archipiélago como para el resto del Estado se espera un descenso en las tasas de crecimiento económico, donde difícilmente se alcanzará el 2%».

Esta es la principal conclusión del estudio presentado por el director del área de Consultoría de Corporación 5, José Miguel González.

En un contexto de incertidumbre geopolítica por los conflictos bélicos en Ucrania y la franja de Gaza, la patronal considera que hay un «caldo de cultivo adecuado para que se dé un proceso de estanflación [estancamiento económico, con aumento del paro y de la inflación]» con sus consecuentes implicaciones sociales y productivas.

En septiembre 541 empresas se inscribieron en la Seguridad Social (+09,9%respecto a agosto), lo que se traduce en un total de 60.868, el 1,1% más que un año antes

Según se constata en el informe, «tras una rápida subida de los tipos de interés, la política monetaria del BCE está empezando a tener un impacto limitado en lo que a la disminución de la inflación se refiere junto a un creciente proceso de ralentización de la demanda».

Para los empresarios, pese a que a lo largo de los tres primeros trimestres de 2023, se había observado «una intensa recuperación de la actividad económica, especialmente en el sector de exportación de servicios de mercado», esta, sin embargo, ha comenzado a desacelerarse de forma gradual a causa de las tensiones inflacionistas pero también ante la incertidumbre de los efectos en las Islas del nuevo conflicto geopolítico en Oriente Medio.

El IPC canario experimentó una variación interanual de un 8,2%, es decir, un 0,7% por debajo de la registrada para el conjunto del país (8,9%)

Por tanto, consideran necesario que el Gobierno regional formule políticas que equilibren las medidas antiinflación con estímulos al crecimiento económico utilizando la fiscalidad, ya que «es una situación que combina altos precios en evolución con el estancamiento de la tasa de crecimiento del PIB».

 En definitiva, en el Archipiélago, subraya el informe, «se asiste a un debilitamiento progresivo de la demanda, tanto interna como externa», principal causa de la evolución del PIB per cápita, «en continuo deterioro desde 1999», cuando estaba en el 99,6% de la media nacional.

El PIB canario del primer semestre de 2023 ha sido de 25.900,8 millones de euros, un 12,4% más que en el mismo período de 2022

De hecho, el informe enfatiza la llamada de atención de Unión Europea respecto a que esta tasa haya bajado en las Islas hasta el 65% de la media, lo que significa un menor crecimiento respecto al resto del Estado».

Con todo, y pese a que la Contabilidad Trimestral de Canarias del Instituto Canario de Estadística (Istac) sitúe el aumento del PIB del Archipiélago en el primer semestre en un 12,4% respecto al mismo periodo de 2022 –25.900,8 millones de euros– la patronal cree «imprescindible disminuir el coste estructural de la economía canaria planteando una reducción generalizada de la cotización a la Seguridad Social de la población ocupada, referenciándola al tiempo de mantenimiento activo del contrato laboral», que además debe acompañarse «con un fuerte descenso de la presión fiscal».

Los empresarios alertan de una estanflación y la caída de la demanda interna y externa

«Para que el Presupuesto de Canarias sea útil debe trabajar en disminuir el coste estructural y en recuperar el diferencial fiscal, y eso solamente se consigue rebajando los impuestos», tanto el Impuesto General Indirecto de Canarias (IGIC) como el Impuesto de Sociedades como el tramo autonómico del IRPF, afirmó González.

El presidente de la CEOE, Pedro Alfonso, expresó en el mismo sentido su deseo de que a mediados de año, una vez se despejen las dudas sobre los Presupuestos del Estado, el Ejecutivo canario lleva a cabo la bajada generalizada del IGIC desde el 7% al 5% que habían prometido en campaña electoral tanto el presidente Fernando Clavijo como el vicepresidente Manuel Domínguez.

El informe incluye, con respecto a la recaudación líquida acumulada por el IGIC, que ésta tuvo un aumento interanual entre enero y agosto de un 13,5%, lo que supone 1.436,6 millones para dichos meses motivado por el alza generalizada de los precios, al tratarse de un impuesto al consumo.

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