Adiós a las monedas físicas: el sustituto que llegará próximamente

Bruselas ha presentado una propuesta para la creación del marco legal de un posible euro digital en la eurozona. Esta divisa digital, que se plantea como alternativa a los medios de pago privados, sería distribuida por los bancos comerciales y tendrá el objetivo de fomentar los pagos digitales seguros, instantáneos y convenientes.

El euro digital busca complementar el dinero en efectivo, ofreciendo las mismas garantías como moneda de curso legal y siendo gratuito y accesible para todos los ciudadanos de la eurozona. Además, se pretende que sea aceptado por igual en todos los países, eliminando las barreras que existen actualmente con los sistemas de pago privados.

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Propuesta de la Comisión Europea

Según la propuesta de la Comisión Europea, los bancos comerciales no podrían cobrar a los usuarios por la distribución del euro digital, pero sí podrían solicitar compensación a los comerciantes que reciban pagos de esta divisa. De esta manera, se establece un equilibrio entre los costos asociados a la implementación y el uso del euro digital.

Uno de los puntos claves de la propuesta es la limitación del monto acumulado por los usuarios en sus cuentas de euros digitales, evitando así que se convierta en un instrumento de inversión que compita con los depósitos bancarios. La cifra exacta del límite será impuest apor el Banco Central Europeo (BCE), aunque se ha sugerido un tope máximo de 3.000 o 4.000 euros.

Por lo que respecta a la privacidad, la Comisión Europea ha establecido que ni el BCE, ni los bancos nacionales tendrán acceso a los datos personales de los usuarios o sus patrones de pago. Sin embargo, los bancos comerciales podrán tener acceso a esta información con salvaguardias adecuadas.

Uso del euro digital

El euro digital se podrá utilizar incluso sin conexión a internet, lo que garantiza su funcionamiento de manera similiar al dinero en efectivo. Además, se permitirá la apertura de cuentas en euros digitales en instituciones públicas y oficinas de correos para aquellos que no deseen abrir una cuenta bancaria convencional.

La Comisión Europea defiende que la implementación del euro digital fomentará la inclusión financiera al proporcionar un método de pago electrónico y gratuito. Por otro lado, permitirá a los bancos europeos competir en un mercado dominado por empresas extracomunitarias y ofrecerá ventajas estratégicas para la Unión Europea.