España exigirá un PCR negativo a los turistas y viajeros procedentes de países de riesgo que entren por sus puertos y aeropuertos a partir del 23 de noviembre. Seis meses después de que Canarias comenzara a solicitar este tipo de pruebas para dar seguridad al destino turístico, el Gobierno central publicará hoy en el BOE una resolución para que esta medida pueda aplicarse después de salvar las reticencias de AENA y Sanidad Exterior. En el Archipiélago la exigencia de tests negativos a los turistas y peninsulares entrara en vigor este sábado, nueve días antes que en el resto del territorio nacional.

El anuncio de esta medida largamente demandada por los empresarios del sector turístico de las Islas cogió a la ministra de Turismo, Reyes Maroto, de visita oficial en Gran Canaria. De hecho en una comparecencia informativa realizada a mediodía para presentar una campaña de promoción de Turespaña no pudo garantizar una fecha concreta para aplicar esta iniciativa que dé suficiente seguridad sanitaria a los corredores turísticos. Maroto se limitó a decir que “sería deseable” que entrara en vigor antes del 2 de diciembre, fecha en la que finaliza el confinamiento decretado por el Gobierno del Reino Unido.

Dos horas después el panorama había cambiado ya que el ministro de Sanidad, Salvado Illa, comunicó a las comunidades autónomas la puesta en marcha de los PCR negativos para todos los viajeros internacionales que entren en España desde el 23 de noviembre. Maroto y el presidente del Gobierno canario, Ángel Víctor Torres, volvieron a comparecer ante los medios para hacer oficial el anuncio. La ministra recordó que la petición de hacer pruebas PCR a los viajeros en sus países de origen ya fue planteada por Canarias en mayo pasado durante una reunión de la Conferencia de Presidentes y que esta medida en todo el país refuerza el decreto del Gobierno autonómico.

A falta de conocer los detalles que se publican hoy en el BOE, la puesta en marcha de esta iniciativa supone un complejo operativo en el que están implicados varios ministerios y supone también un refuerzo del personal de AENA y de Sanidad Exterior para controlar la entrada de viajeros, sean turistas o no, con el fin de que justifiquen la realización de la PCR y su resultado negativo al menos 72 horas antes de viajar y la obligatoriedad de los turoperadores, agencias de viajes y el resto de operadores turísticos de comunicar al usuario la necesidad de la prueba. En el caso de que el pasajero llegue al aeropuerto sin acreditar que se ha hecho el test o si hay sospechas sobre su estado de salud, se tendrán que realizar la prueba diagnóstica en el mismo aeropuerto antes de salir del mismo.

La medida se anuncia para aquellos viajeros procedentes de países de riesgo. En los países de la Unión Europea y del espacio Schengen se establece un margen máximo de 150 casos por cada 100.000 habitantes en base a los criterios establecidos por la Comisión Europea en octubre. Para los terceros países la referencia básica será la incidencia acumulada por 100.000 habitantes en 14 días.

La exigencia de un test es “un paso más para tener seguridad”, según la ministra, quien indicó que se ha adoptado en coordinación con todos los países de la Unión Europea. A su juicio, con esta decisión “España se sitúa a la vanguardia”, pues muy pocos países hacen algo similar, y es “pionera” en adoptar medidas para controlar la pandemia y su repercusión sanitaria y económica.

El presidente Ángel Víctor Torres celebró que el Estado haya puesto en marcha esta medida después de que Canarias la solicitara por primera vez en mayo y después en junio y en julio, tanto en la Conferencia de Presidentes como en la Conferencia de las Regiones Ultraperiféricas (RUP). El decreto ley aprobado recientemente por el Ejecutivo regional entra en vigor este sábado para el 80% de los viajeros extranjeros que entran en Canarias para hospedarse en hoteles, apartamentos y viviendas vacaciones regladas pero también para los peninsulares sin límites de nivel de contagiosidad de 150 casos por 100.000 habitantes.

Por su parte, el consejero de Sanidad, Blas Trujillo, dijo ayer tras el Consejo Interterritorial de Sanidad que Canarias se consagra como un “destino seguro” se cumple el “anhelo” del Gobierno regional, que demandó esta medida desde que se inició la desescalada, remarcando el “trabajo duro” realizado por ambos ejecutivos.